Muchos adultos, quienes estarían encantados de poder pagar por un iPad, encuentran sorprendente un programa en Maine que ofrece a niños preescolares estos aparatos como parte de una iniciativa de aprendizaje.
En la escuela elemental de Sherwood Heights en Auburn, Laurie Gerard se prepara para su clase en el iPad. Antes de recibir su tablet, los niños tienen que recitar las reglas de uso: “Mantener los dedos en la parte inferior, con los pulgares en la parte superior y así evitar que el iPad se caiga”.
Mientras que algunos critican el proyecto de iPad como un desperdicio de dinero, las autoridades en la escuela dicen que buscan mejorar el aprendizaje en ciertas áreas.
A medida que el año escolar avanza, Gerard planea utilizar diferentes aplicaciones del iPad que le permitirán individualizar el aprendizaje de cada niño.
El estudiante Daniel Fitzgerald interactúa con un juego que le permite deletrear las letras de su nombre utilizando el iPad.
“Mi parte favorita del iPad son las actividades, como juegos y cosas así”, dice el niño de cinco años de edad.
Laura Shaw, directora de la escuela, dice que el iPad provee retroalimentación a los niños inmediatamente.
“Cuando usted tiene 18 estudiantes en el salón y ve a 10 de ellos levantar la mano, el profesor hace lo que puede por atender a todos. Pero a veces, con ciertas aplicaciones del iPad, los niños pueden saber si lo que han hecho es lo correcto y continuar, o saber que necesitan más ayuda”, explica Shaw.
Cerca de 300 estudiantes preescolares en Auburn están participando de este programa de iPads en 2011.
Por su parte, los funcionarios de la escuela indicaron que el acceso a estos aparatos proveerá información comparativa sobre el impacto del uso de estos tablets en los estudiantes.