El primer ministro de Israel informó que va a seguir adelante con una operación militar en la Franja de Gaza hasta que los ataques con cohetes desde territorios palestinos se detengan.
Benjamin Netanyahu hizo los comentarios en un discurso el 20 de agosto, un día después que las conversaciones para poner fin a la guerra de un mes de Israel contra los militantes de Hamas se colapsaron en El Cairo.
Las palabras de Netayahu apuntan a un período prolongado de lucha en el territorio palestino.
Funcionarios palestinos dicen que al menos 20 palestinos han muerto desde que las conversaciones de alto el fuego se derrumbaron.
El Ejército israelí informó el miércoles que había realizado 30 ataques durante la noche y que los militantes lanzaron unos 70 misiles desde territorio palestino.
Uno de los ataques israelíes fue dirigido contra la casa de Mohamed Deif, jefe militar de Hamas que ha escapado milagrosamente de varios atentados en el pasado. Esta vez, su mujer y una hija de dos años murieron.
La lucha había tenido una pausa de 10 días durante los cuales los negociadores se reunieron en El Cairo buscando una salida de largo plazo a la crisis que comenzó hace seis semanas.
Las conversaciones no llevaron a ningún acuerdo por las demandas palestinas de que Israel termine el bloqueo contra Gaza y por el deseo de Israel de desmilitarizar Gaza.
“Hemos informado a Egipto que en unas horas saldremos de El Cairo como delegación palestina, pero consideramos que las negociaciones han terminado", dijo Azzam al-Ahmad, jefe de la delegación palestina.
"Cuando los moderadores egipcios consideren que se dan las condiciones para reanudar las negociaciones, después de que recibamos respuesta a nuestra propuesta, estamos listos para regresar. En cuando a la arrogancia de Netanyahu y de Israel, no toleraremos tal actitud”, agregó.
Los combates han dejado más de 2.000 palestinos muertos, la mayoría de ellos civiles, y 64 soldados y tres civiles israelíes.