La diplomática cubana que hasta hace poco fue la imagen pública de la apertura de relaciones entre Cuba y Estados Unidos, Josefina Vidal, dejará su cargo para convertirse en la nueva embajadora de La Habana en Canadá, informaron el domingo las autoridades.
Vidal fue juramentada para su nuevo cargo en una ceremonia encabezada por el presidente Raúl Castro, de acuerdo con la prensa cubana. Autoridades señalaron que Gustavo Machín, subdirector del departamento de relaciones con Estados Unidos, también dejará su puesto para convertirse en embajador ante España.
En un gobierno reconocido por opacidad, Vidal y Machín contaban con una inusual libertad para discutir públicamente las relaciones de Cuba con Washington. A menudo ofrecían conferencias de prensa para hablar sobre los vínculos diplomáticos que se reestablecieron hace dos años. Bajo su tutela, el gobierno cubano normalmente hablaba con mayor apertura sobre el estado de las relaciones bilaterales, de lo que lo hacía su contraparte estadounidense.
Vidal asumió el cargo de directora general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba en 2006 y ayudó a negociar el restablecimiento de las relaciones diplomáticas y permaneció desués de que el presidente Donald Trump anunciara el mes pasado una nueva política en torno a Cuba.
Al parecer, el gobierno cubano ha decidido traer nuevos rostros para lidiar con el gobierno de Trump, aunque no se conoce de inmediato la identidad de quienes asumirán los nuevos cargos.
Trump retuvo a la mayor parte de los elementos de la política de Obama, aunque reimpondrá límites a la capacidad de individuos estadounidenses para viajar a Cuba.
La contraparte de Vidal en muchos aspectos de las negociaciones, era el diplomático estadounidense de mayor cargo en La Habana, el embajador Jeffrey DeLaurentis, quien dejó su puesto este mes para volver a Estados Unidos.