El secretario de Estado testifica junto a otros dos funcionarios ante la Comisión de Asuntos Exteriores de la Casa de Representantes.
El gobierno del presidente Barack Obama continuaba su esfuerzo por conseguir una autorización del congreso para atacar militarmente a Siria enviando a los secretarios de Estado, John Kerry, y de Defensa, Chuck Hagel, y al jefe del Estado Mayor, Martin Dempsey, a la comisión de Relaciones Exteriores de la Casa de Representantes.
“Pasó.Y el régimen de Bashar al-Assad lo hizo”, dijo Kerry este miércoles a los legisladores, en referencia al ataque con gas neurotóxico que causó la muerte a más de mil civiles sirios. “El mundo se pregunta si Estados Unidos va a consentir con su silencio”, añadió.
De igual manera, el secretario Hagel agregó que “debemos hacer que Assad pague” y asegurarse de que “la palabra de Estados Unidos tenga algún significado”.
Aunque se espera que la resolución sea aprobada en la Comisión, la resistencia en el resto de la Cámara es grande tanto en la derecha como en la izquierda.
El representante demócrata por Florida, Alan Grayson, por ejemplo, está tratando de conseguir más apoyo para oponerse a la resolución que sería votada la próxima semana. De igual manera, el representante republicano por ese mismo estado, Ted Yoho, ha anunciado que votará en contra.
En el Senado, Obama necesita 60 votos para evitar una potencial maniobra obstructiva o filibusterismo, mientras que en la Cámara de Representantes se necesitan 217 votos.
Los cuatro líderes de más alto nivel entre demócratas y republicanos han plegado su apoyo a la resolución, pero los líderes partidarios no obligarán a nadie a votar a favor porque el voto en este tipo de decisiones es considerado un asunto de conciencia.
“Pasó.Y el régimen de Bashar al-Assad lo hizo”, dijo Kerry este miércoles a los legisladores, en referencia al ataque con gas neurotóxico que causó la muerte a más de mil civiles sirios. “El mundo se pregunta si Estados Unidos va a consentir con su silencio”, añadió.
De igual manera, el secretario Hagel agregó que “debemos hacer que Assad pague” y asegurarse de que “la palabra de Estados Unidos tenga algún significado”.
Aunque se espera que la resolución sea aprobada en la Comisión, la resistencia en el resto de la Cámara es grande tanto en la derecha como en la izquierda.
El representante demócrata por Florida, Alan Grayson, por ejemplo, está tratando de conseguir más apoyo para oponerse a la resolución que sería votada la próxima semana. De igual manera, el representante republicano por ese mismo estado, Ted Yoho, ha anunciado que votará en contra.
En el Senado, Obama necesita 60 votos para evitar una potencial maniobra obstructiva o filibusterismo, mientras que en la Cámara de Representantes se necesitan 217 votos.
Los cuatro líderes de más alto nivel entre demócratas y republicanos han plegado su apoyo a la resolución, pero los líderes partidarios no obligarán a nadie a votar a favor porque el voto en este tipo de decisiones es considerado un asunto de conciencia.