Una cápsula no tripulada del SpaceX, de Elon Musk, regresó a Tierra el viernes después de una estadía breve en la Estación Espacial Internacional, para culminar la primera misión de prueba orbital de la NASA para retomar el vuelo espacial humano, desde suelo estadounidense, a finales de 2019.
Un cohete SpaceX lanzó la cápsula el sábado pasado desde el Centro Espacial Kennedy en Florida. Después de una misión de cinco días, Crew Dragon se separó de manera autónoma alrededor de las 2:30 a.m. EST (0730 GMT) la madrugada del viernes y descendió a Tierra a las 8:45 a.m. en la costa de Florida.
Los funcionarios de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio de los EE. UU. analizarán el rendimiento del despliegue del paracaídas de la cápsula SpaceX y su flotabilidad después del descenso: dos de las preocupaciones de diseño y funcionalidad primero reportadas por Reuters en febrero.
La primera misión de este tipo, antes del vuelo de prueba tripulado de SpaceX programado para junio, trajo 400 libras de equipo de prueba a la estación espacial, incluido un muñeco llamado Ripley, equipado con sensores alrededor de su cabeza, cuello y columna vertebral para monitorear cómo se sentiría un humano realizando el vuelo.
La NASA ha otorgado a SpaceX y Boeing Co $ 6 mil 800 millones en total para construir sistemas competidores de cohetes y cápsulas para lanzar a los astronautas en órbita desde suelo estadounidense, algo que no ha sido posible desde que el Transbordador espacial de Estados Unidos fue retirado de servicio en 2011.