Cinco migrantes venezolanos, entre ellos dos menores de edad, fueron liberados tras haber sido secuestrados el fin de semana mientras viajaban con un grupo de casi 40 personas en una carretera del norte de México, dijeron este martes las autoridades.
El sábado, un autobús con 36 pasajeros a bordo fue interceptado por hombres armados cuando cubría la ruta Reynosa-Matamoros, en el estado norteño de Tamaulipas. 31 pasajeros de la unidad, migrantes de distintas nacionalidades, fueron secuestrados, dijo a Reuters un vocero de la Secretaría de Seguridad Pública estatal.
En la zona, fronteriza con Estados Unidos, se encuentran aglomerados miles de migrantes que intentan cruzar de manera irregular por el Río Grande hacia el país del norte.
Huyendo de la pobreza y violencia en sus países, un número récord de migrantes atravesó el año pasado Centroamérica y México con la intención de llegar a Estados Unidos. La situación fue impulsada, en parte, por un fuerte aumento de venezolanos que huyen del prolongado colapso de la otrora próspera nación petrolera.
La noche del lunes, efectivos de la Guardia Nacional liberaron a cinco migrantes venezolanos después de que sus captores, dos hombres, huyeron del vehículo donde los trasladaban al detectar la presencia de los uniformados, dijo la Secretaría de Seguridad estatal en un comunicado.
También lea EEUU y México discutirán en enero acciones para enfrentar el creciente flujo de migrantesLos migrantes dijeron a las autoridades que eran parte del grupo de 31 migrantes secuestrados el fin de semana por las mismas personas que los estaban trasladando. Las autoridades dijeron que siguen investigando el secuestro de los otros 26 que aún siguen retenidos.
"Ya se está haciendo la búsqueda desde los primeros momentos", dijo el martes el presidente Andrés Manuel López Obrador, al finalizar su rueda de prensa diaria. "Yo creo que mañana ya vamos a tener más información", agregó.
Por su posición geográfica colindante con Estados Unidos, Tamaulipas enfrenta graves problemas de inseguridad debido a la lucha que mantienen diversos grupos del crimen organizado por el control de rutas para traficar drogas y migrantes.
En marzo de 2019, sujetos armados detuvieron un autobús de pasajeros en la carretera San Fernando-Reynosa y se llevaron a una veintena de personas. Hasta el momento, se desconoce su paradero. Usualmente, los delincuentes secuestran a los migrantes y piden a ellos o sus familiares dinero para su rescate.
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