Los rebeldes libios, liderados por el Consejo Nacional de Transición (CNT), esperan reanudar dentro de dos o tres meses las exportaciones de petróleo que se vieron interrumpidas a causa de meses de conflicto en el país.
Ali Tarhouni, un representante del gobierno rebelde, dijo a la agencia Reuters que se espera que el país pueda volver a exportar entre 500 mil y 600 mil barriles diarios de crudo para esa fecha.
Según Tarhouni, los daños causados durante la guerra a los pozos petroleros han sido mínimos y alrededor del 90 por ciento de las instalaciones se hallan en buen estado.
La intención es continuar honrando los contratos actuales suscritos con firmas petroleras e ir incrementando la producción hasta alcanzar más o menos en un año la cantidad de 1,6 millones de barriles que antes se exportaban normalmente, dijo.
Tras la captura de Trípoli por los rebeldes, las compañías petroleras y los países que dependían de las importaciones de crudo libio tienen sus miras puestas en la reconstrucción del país, el gran reto que las nuevas autoridades libias tienen por delante.
Para los libios el petróleo es la principal industria por lo que echar a andar la producción y las exportaciones es algo crucial para un país que posee las mayores reservas de crudo en Africa y que antes de la rebelión contra Moammar Gadhafi extraía alrededor del 2 por ciento de la producción mundial.
La mayor parte del crudo libio se exportaba a Europa, donde el principal comprador históricamente ha sido Italia. China y otros países también eran grandes importadores.
Según Michele Dunne, del Centro Rafik Hariri para el Oriente Medio en el Consejo Atlántico, Libia no tendrá los problemas que han tenido otras naciones en su reconstrucción porque “dispondrá de dinero para poder hacerlo”, dijo.