Libia pide alto el fuego

El ministro libio de Relaciones Exteriores, Abdelati Al-Obeidi, acusó a la OTAN de una "tentativa de asesinato" contra Gadhafi.

A la espera de que el fiscal de la Corte Penal Internacional de los nombres contra los que lanzará la orden de detención, Libia pide tregua.

El primer ministro de Libia ofrece una tregua a cambio de un inmediato alto el fuego de la OTAN mientras el fiscal de la Corte Penal Internacional, Luis Moreno Ocampo prepara las órdenes de detención de tres funcionarios libios por crímenes de lesa humanidad.

El primer ministro al-Baghdadi Mahmoudi pidió el cese del fuego en Trípoli tras una reunión con el enviado especial de la ONU, Abdul Ilah Khatib. Su petición llegó cuando la televisión estatal libia informaba de que un nuevo ataque aéreo de la OTAN cayó en la ciudad occidental de Zuwara, cerca de la frontera tunecina.

Se espera que el fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional, el argentino Luis Moreno Ocampo, presente un documento de 74 páginas delineando las denuncias contra tres cargos del régimen de Gadhafi, entre los que el líder estaría incluido, por atacar a civiles de forma sistemática desde que comenzara la brutal represión contra los rebeldes el pasado febrero. La orden de captura impediría la opción del exilio para Gadhafi.

Mahmudi indicó que el régimen quiere "un alto al fuego inmediato que coincidiría con un cese de los bombardeos de la OTAN", según la agencia oficial Jana.

Por su parte, el ministro libio de Relaciones Exteriores, Abdelati Al-Obeidi, también denunció "la magnitud de los abusos y las violaciones graves cometidas por la OTAN", según la agencia oficial Jana. Acusó también a la OTAN de una "tentativa de asesinato" del dirigente libio, cuya residencia de Bab Al-Aziziya ha sido bombardeada varias veces.

Según la agencia Jana, sitios "militares y civiles" en la ciudad de Zuara, 120 kilómetros al oeste de Trípoli, fueron objeto de bombardeos, con "pérdidas humanas y daños materiales".

Censura del Papa

El papa Benedicto XVI censuró la violencia en Libia y Siria y pidió pacíficas resoluciones a los conflictos en ambos países.

Tras las oraciones en el Vaticano, el papa dijo que está siguiendo el conflicto en Libia con gran preocupación. Indicó que la violencia allí ha causado un gran número de víctimas, especialmente en la población civil. El sumo pontífice apeló a negociaciones para poner fin a los combates.

Benedicto XVI también dijo que estaba preocupado por Siria, donde dijo, es urgente restaurar la armonía. Pidió a las autoridades sirias que respeten lo que llamó las legítimas aspiraciones del pueblo por la paz y la estabilidad.

Cientos de personas han sido muertas en Libia y Siria mientras las autoridades de esos países han usado sus tropas para reprimir manifestaciones anti gubernamentales.