Con una multitud entusiasta que llenó el Mason Temple de la Iglesia de Dios en Cristo en Memphis, el ambiente estaba cargado de nostalgia el martes al recordarse los 50 años de que el reverendo Martin Luther King Jr. diera su último discurso.
Un cantante de música góspel dirigió una emocionante interpretación de “Lift Every Voice and Sing”, y la reunión tomó un aire de renacimiento, como si los presentes pudieran sacar a King de la cama de su hotel al otro lado de la ciudad. Fue en este santuario que pronunció su famoso discurso “Mountaintop” (La cima de la montaña) la noche antes de ser asesinado.
Lee Saunders, un líder sindical nacional, narró cómo esa noche de 1968 King hizo una presentación no planeada para dar el famoso discurso sin anotaciones luego de que sus asistentes vieron lo apasionado de la multitud: “Ahí estaba el hombre al que querían escuchar”.
Your browser doesn’t support HTML5
Pero Saunders hizo hincapié en que las conmemoraciones de la semana no sólo son para ver hacia el pasado.
“El trabajo del doctor King _nuestro trabajo_ no está terminado. Aún debemos luchar; aún debemos sacrificar. Aún debemos educar y organizar y movilizar. Por eso estamos aquí en Memphis. No sólo para honrar nuestra historia, sino para asir nuestro futuro”, afirmó.
Por otro lado, cuando lo mataron hace 50 años, King estaba trabajando en una campaña para unir a gente pobre de diversos orígenes en torno a exigencias de mejores casas, trabajos y educación.
Ahora, dirigentes de derechos civiles están reviviendo la Campaña de la Gente Pobre con marchas de 40 días, protestas pacíficas y manifestaciones. Organizadores de la campaña hablaron sobre los planes el martes en Memphis en la víspera del aniversario de la muerte de King.
“Estos primeros 40 días no van a ser el final, son el comienzo”, dijo el reverendo William Barber, de Carolina del Norte, uno de los copresidentes de la campaña reactivada. “Van a ver acción moral directa y simultánea. Verán capacitación simultánea de gente para prepararse para una temporada de movilización de votantes masiva”.
A partir del 14 de mayo, sindicalistas y otros activistas participarán en eventos en unos 30 estados, enfocándose en el Congreso y legislaturas estatales. Después, el 23 de junio, planean realizar una gran manifestación en Washington, parecida a la que King vislumbró. Tras la muerte del líder, otros dirigentes de derechos civiles realizaron la primera Campaña de la Gente Pobre en 1968.
Barber y la reverendo Liz Theoharis, quien comenzó a planificar la campaña en diciembre, hablaron sobre los detalles de la movilización en el Museo Nacional de Derechos Civiles, en Memphis, uno de varios lugares donde se llevarán a cabo eventos conmemorativos por el 50 aniversario de la muerte de King.
Aparte de movilizar votantes, Barber dijo que la campaña resaltará la pobreza, el racismo y los daños al medio ambiente. Este mes, los organizadores planean publicar un estudio sobre la pobreza en Estados Unidos en las últimas cinco décadas.
King vislumbró la Campaña de la Gente Pobre en Washington a modo de denuncia de la injusticia económica, justo cuando él cambiaba su enfoque de derechos civiles a derechos humanos. Pero antes de que pudiera terminar esos planes, fue a Memphis en 1968 para apoyar una huelga de trabajadores sanitarios que estaban cansados de percibir bajos salarios y laborar bajo condiciones peligrosas.
El 28 de marzo, King encabezó una marcha en Memphis que se tornó violenta, y regresó a casa en Atlanta. Tratando de demostrar que las manifestaciones no violentas todavía funcionaban, King prometió dirigir una marcha pacífica y regresar a Memphis unos días después.
El líder por los derechos civiles estaba en el balcón del Motel Lorraine cuando le alcanzó un tiro el 4 de abril de 1968. Murió en el hospital a los 39 años.