Los fiscales generales de Maryland y el Distrito de Columbia anunciaron que han presentado una demanda contra el presidente Donald Trump alegando que ha violado la Constitución al mantener vínculos con su imperio global de negocios.
El fiscal del Distrito de Columbia, Karl Racine y el de Maryland, Brian Frosch, realizaron este lunes un anuncio conjunto para confirmar la demanda en la que citan que los contratos, propiedades y otros “enredos” comerciales alrededor del mundo del presidente Trump representan un conflicto de intereses bajo una cláusula de la Constitución.
La cláusula de los emolumentos prohíbe a funcionarios federales estadounidenses aceptar cosas de valor de gobiernos extranjeros a menos que el Congreso lo haya autorizado.
“Los conflictos de interés del presidente amenazan nuestra democracia”, dijo a los periodistas el fiscal general de Maryland, Brian Frosch.
“No podemos tratar las continuas violaciones de la Constitución por parte del presidente y su indiferencia por los derechos del pueblo estadounidense como el nuevo status quo aceptable”, agregó Frosch.
El fiscal general del Distrito de Columbia dice que el presidente ha hablado sobre trazar una línea entre la presidencia y sus muchos negocios y propiedades, pero que "no ha cumplido con su promesa".
Trump dijo que estaba cambiando los activos en un fideicomiso administrado por sus hijos para eliminar posibles conflictos de intereses.
“Nosotros tenemos la obligación de hacer cumplir la ley y esa es la razón por la que estamos tomando acciones el día de hoy”, agregó Racine.
La Casa Blanca no respondió de inmediato a la solicitud de comentarios al respecto.
El presidente Trump llamó a una demanda anterior, similar, sobre la cláusula de la Constitución, una cuestión "sin mérito, totalmente sin mérito".
Al inicio de su gobierno Trump entregó la administración de sus negocios a sus dos hijos adultos y se comprometió a no concertar nuevos acuerdos en el exterior durante el tiempo que ocupe la presidencia de Estados Unidos.