Nueve personas fueron asesinadas por un joven blanco en una iglesia afroestadounidense en la ciudad de Charleston, Carolina del Sur el miércoles por la noche.
El jefe de la policía de Charleston, Greg Mullen, dijo a los reporteros que el asesino, descrito como un joven blanco de entre 21 y 25 años, entró a la Iglesia Episcopal Metodista Africana Emmanuel durante una reunión semanal de oración y estudio de la Biblia en la que se quedó durante una hora antes de comenzar a disparar.
Mullen dijo que ocho personas –incluyendo el pastor y senador estatal Clementa Pinckney— murieron en la iglesia y una más falleció camino al hospital. Otra persona quedó con vida, presuntamente para que contara lo que había sucedido.
El jefe dijo que la masacre está siendo investigada como un crimen racial.
Horas más tarde, Mullen agregó que el presunto asesino, al que describió como "extremadamente peligroso", tiene pelo rubio cenizo, viste sudadora gris y blue jeans, y conduce un auto oscuro con una matrícula “peculiar”. Panfletos con fotos del sospechoso y su auto fueron distribuidos a los medios.
El alcalde de Charleston, Joseph Riley, dijo que el asalto es “una tragedia indescriptible y desgarradora”.
“La única razón para que alguien entre a una iglesia y le dispare a la gente que está orando es por odio, es la única razón. Es el acto más vil que uno pueda imaginar y vamos a presentar a esa persona ante la justicia lo más pronto posible”, dijo el alcalde.
Entre las víctimas mortales hay seis mujeres. También se confirmó la identidad de una de las víctimas mujeres. Tyanza Sanders es una joven recién graduada de la universidad de Columbia.