A pocos días de que comience un congreso llamado a cimentar el liderazgo de Xi Jinping, una de las voces más autorizadas en lo que a la trayectoria del Partido Comunista Chino (PCCh) se refiere, el historiador Gao Wenqian advierte que la mayor amenaza para el presidente chino, Xi Jinping, "es él mismo".
Como estudioso de la historia del PCCh, Wenqian, de 69 años, ha pasado más de cuatro décadas escribiendo sobre los principales líderes del partido, incluidos el presidente Mao Zedong y Zhou Enlai, quien se desempeñó como primer ministro desde 1949 hasta su muerte, en 1976.
El libro de Gao de 2003, 'Zhou Enlai en sus últimos años', convirtió a Gao en uno de los autores chinos más leídos y en una china en el zapato del Partido Comunista. Gao emigró a los Estados Unidos en 1993, después de ser degradado y criticado por apoyar el movimiento de derechos humanos de China, en 1989.
La Voz de América habló con Gao sobre sus puntos de vista sobre Xi Jinping, quien se espera que sea elegido para un tercer mandato como presidente del partido, en el 20º Congreso del Partido Comunista, que comienza el domingo con más de 2.000 delegados de toda China.
También lea ¿Por qué las empresas deciden irse o quedarse en China?Gao cree que Xi se enfrenta a un desafío sin precedentes a pesar de su aparentemente sólido control del partido y afirma: "El mayor enemigo de Xi Jinping es él mismo".
La siguiente entrevista ha sido editada para mayor claridad y duración.
VOA: El mayor punto de interés del congreso es saber si Xi Jinping romperá la tradición y asumirá un tercer mandato. La mayoría de los observadores creen que, sin duda, Xi continuará con un tercer mandato y que el congreso es solo una formalidad. ¿Por qué cree que todavía hay suspense?
Gao: Por supuesto que sabemos que lo más probable es que Xi asuma un tercer mandato; pero, ¿por qué sigue habiendo suspense? Hay detalles que merecen nuestra atención. El Congreso del Partido, por supuesto, apenas supone un encuentro para estampar el sello de aprobación; pero aún así, hay este proceso de aprobación y nadie puede garantizar que nada saldrá mal. Xi obviamente hará todo lo posible para que todo transcurra sin problemas, pero es difícil para él controlar a estos miembros anteriores del Politburó.
Sabemos que el partido ha ordenado a los funcionarios jubilados que "respeten las disciplinas políticas y no critiquen al partido", pero ¿cómo se hace cumplir? ¿Y si no obedecen? ¿Podrá arrestarlos a todos? Eso sería desastroso.
Ya hay diferentes opiniones sobre la alianza con Rusia, sobre la política de cero-covid..."
Entonces, podemos imaginar, cuando se reúna el Comité Permanente del Presidium, si un anciano no está de acuerdo con Xi y otros hacen lo mismo, la situación podría estar fuera de control. Es por eso que nunca sabemos lo que sucederá hasta el último momento.
De ahí el suspense, especialmente en un momento en que Xi Jinping se ha ganado tantos enemigos durante sus 10 años de gobierno. Ahora quiere romper la tradición y mantenerse en el poder, lo que hace que el ambiente político sea excepcionalmente tenso. Dentro del Politburó, ya hay diferentes opiniones sobre la alianza con Rusia, sobre la política de cero-covid, sobre la economía en declive y la crisis de Taiwán.
Si uno de los veteranos se opone a Xi y más personas hacen lo mismo, algo podría suceder. Esto sucedió en el pasado, cuando el exlíder Chen Yun expresó diferentes opiniones en el 13° congreso del partido, que cambió la agenda de la reunión en 1978.
VOA: Cuando Xi Jinping regresó de su primer viaje al extranjero a Asia central desde el brote de COVID-19, "desapareció" durante 10 días. Algunos observadores dicen que podría haber pasado tiempo hablando con estos funcionarios retirados para presionarlos. ¿Cree que ese es el caso?
Gao: Sabemos que el Partido Comunista siempre opera entre bambalinas, así que nunca sabemos los detalles. Pero una cosa que sé con certeza es que el mayor desafío de Xi es presionar a esos funcionarios retirados. ¿Cómo sabe que eso es algo garantizado? Esos jubilados podrían oponerse totalmente a él en las reuniones, aunque no lo expresen de antemano. La solución menos arriesgada sería no invitar a estos antiguos funcionarios a las reuniones. Pero esa sería otra gran acción de romper las tradiciones.
Pero no creo que Xi pueda evitar los riesgos al no invitarlos a las reuniones. Esta es una tradición muy antigua. Estos antiguos funcionarios jubilados siempre están invitados a las reuniones, mientras estén vivos y no hayan cometido ningún error político.
VOA: Algunos analistas no creen que la feroz lucha por el poder al estilo de "vida o muerte" en la era de Mao siga existiendo. Piensan que Xi ha concentrado el poder y ha cambiado las reglas del juego. Ha eliminado a sus oponentes con su campaña anticorrupción. ¿Cuál es su observación al respecto?
Gao: Es un argumento superficial que Xi no tiene oponentes políticos. Sí, es cierto que Xi ha concentrado su poder a un nivel sin precedentes. Pero su defecto fatal es que no tiene amigos. Parece que no tiene oponentes, pero sus oponentes están en todas partes, excepto que todos están ocultos. Xi no confía en nadie y vive con miedo y soledad. Esto le sucede a todos los dictadores.
El mayor enemigo de Xi Jinping es él mismo. No tiene talentos para usar y no tiene a nadie en quien confiar. Xi vive en la glorificación omnipresente, pero no confía en quienes le cantan odas. En realidad, odia a esas personas de doble rostro. Todos aquellos que se beneficiaron de la reforma y apertura de Deng Xiaoping odian a Xi por tomar el camino hacia atrás. Todos son sus oponentes.
También lea Opinión sobre China se ha deteriorado con Xi Jinping: encuestaTambién es un error pensar que la lucha interna dentro del partido no es del estilo de "vida o muerte". Así fue en la era de Mao, pero no en la época de los secretarios del partido posteriores a Mao, como Deng Xiaoping, Jiang Zemin y Hu Jintao. Había una regla tácita de que ningún miembro del Politburó podía ser perseguido, pero Xi rompió esa regla.
Xi hizo que la lucha interna del partido volviera a ser muy feroz. Utilizó su campaña anticorrupción para derrocar a Zhou Yongkang, el exjefe del sistema judicial, y varios funcionarios de alto rango murieron misteriosamente. Xi Jinping es el mayor infractor de las convenciones políticas del Partido Comunista. Al buscar términos ilimitados, algo que Deng Xiaoping había prohibido, deja enormes consecuencias desastrosas para el partido y el país.
[El periodista Bo Gu contribuyó a este informe]
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.