Se necesitan pulmones

Lisa Bowman, quien sufre de insuficiencia pulmonar, ha estado aguardando durante dos años por un pulmón y espera que con las nuevas investigaciones, mejoren sus posibilidades de respirar normalmente.

Para miles de personas en Estados Unidos, un trasplante de pulmón es la única esperanza de que algún día respiren normalmente.
Científicos estadounidenses llevan a cabo un estudio que tienen la esperanza aumente el número de donantes de pulmones a pacientes que necesitan trasplantes.

Sus esfuerzos están centrados en encontrar una mejor forma de preservar los pulmones de una persona fallecida hasta que puedan ser trasplantados a una persona que los necesite.

El equipo dirigido por el Dr. Thomas Egan, en la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill, está realizando el estudio.

“Esto tendría un profundo impacto en el número de pulmones que están disponibles para trasplante”, dijo el Dr. Thomas Egan, del equipo de la Universidad de Carolina del Norte, en Chapel Hill, que realiza el estudio.

“Ahora en Estados Unidos hacemos 1.800 trasplantes por año. Pienso que podríamos estar haciendo entre 40 y 50.000 trasplantes de pulmones por año”, vaticinó el Dr. Egan.

Para miles de personas, un trasplante de pulmón es la única esperanza de que algún día respiren normalmente.

Sin embargo, conseguir órganos de donantes que mueren súbitamente fuera de un hospital, es a menudo complicado. En consecuencia, hasta un 80% de los pulmones donados no se pueden usar.

El Dr. Egan quiere llegar a las víctimas de muertes súbitas en sus casas y que equipos médicos bombeen un poco de aire en sus pulmones para preservaros mientras el cuerpo es trasladado a una sala de operación para recuperar el órgano.

Los pulmones que pasen el chequeo serán trasplantados a pacientes que participan del estudio realizado con fondos de los Institutos Nacionales de Salud.