Peritos revisan y buscan en los escombros pistas que permitan esclarecer las causas de la explosión en el edificio de PEMEX que causó 35 muertos y más de un centenar de heridos.
Centenares de investigadores inspeccionan en ciudad de México cada rincón en la planta baja del edificio central de PEMEX afectadas por una violenta explosión ocurrida la víspera y encontrar la respuesta de qué fue lo que ocurrió.
La explosión en las oficinas centrales de la petrolera estatal mexicana Pemex provocó la muerte de 35 personas y más de 121 resultaron lesionadas, según cifras actualizadas por las autoridades. Además se informó que 19 personas permanecen aún hospitalizadas.
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, visitó la zona del desastre, declaró tres días de duelo y dijo haber cursado instrucciones a la Procuraduría General de la República para que no se descarte ninguna línea de investigación.
El Procurador General, Jesús Murillo, informó que no habían sido hallados indicios de fuego en las instalaciones y que aún se desconocía si la tragedia había sido provocada por “un accidente, una imprudencia o un atentado”.
Daños en una subestación eléctrica y la posterior acumulación de gases podrìan haber sido las causas de la violenta explosión que afectó el edificio central de Petróleos Mexicanos y que provocó serios daños a la planta baja de la estructura.
Vecinos de la zona escucharon la detonación cerca de las calles Bahía Ballenas y Bahía de Todos los Santos, en la parte posterior de la Torre.
Las vías del sector en el centro del Distrito Federal fueron cerradas por las autoridades.
La torre de PEMEX tiene 214 metros de altura y está enclavada en una zona céntrica del Distrito Federal.
La empresa anunció que las actividades administrativas de la dependencia quedaban suspendidas hasta nuevo aviso.
La explosión en las oficinas centrales de la petrolera estatal mexicana Pemex provocó la muerte de 35 personas y más de 121 resultaron lesionadas, según cifras actualizadas por las autoridades. Además se informó que 19 personas permanecen aún hospitalizadas.
El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, visitó la zona del desastre, declaró tres días de duelo y dijo haber cursado instrucciones a la Procuraduría General de la República para que no se descarte ninguna línea de investigación.
El Procurador General, Jesús Murillo, informó que no habían sido hallados indicios de fuego en las instalaciones y que aún se desconocía si la tragedia había sido provocada por “un accidente, una imprudencia o un atentado”.
Daños en una subestación eléctrica y la posterior acumulación de gases podrìan haber sido las causas de la violenta explosión que afectó el edificio central de Petróleos Mexicanos y que provocó serios daños a la planta baja de la estructura.
Vecinos de la zona escucharon la detonación cerca de las calles Bahía Ballenas y Bahía de Todos los Santos, en la parte posterior de la Torre.
Las vías del sector en el centro del Distrito Federal fueron cerradas por las autoridades.
La torre de PEMEX tiene 214 metros de altura y está enclavada en una zona céntrica del Distrito Federal.
La empresa anunció que las actividades administrativas de la dependencia quedaban suspendidas hasta nuevo aviso.