El gobierno de México ejecuta medidas, muchas de ellas muy criticadas, para proteger su frontera y al mismo tiempo evitar que los migrantes centroamericanos viajen en el tren de carga conocido como “La Bestia”, por los riesgos que este implica.
La Secretaría de Gobernación de México emitió instrucciones a sus funcionarios para que ejerzan un mayor control en la ruta de este tren en el que los migrantes se montan arriesgando sus vidas.
El detalle de estas decisiones se conocerán esta semana y se ha adelantado que se pretende poner orden en una zona que está acechada por narcotraficantes y maras o pandillas que buscan extorsionar, asaltar y hasta matar a sus víctimas.
Las regiones que están en el proyecto de mayor control de autoridades mexicanas son Chiapas y Tabasco, fronterizas con Guatemala.
Este plan forma parte del denominado Programa Frontera Sur que el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, anunció para controlar el acceso de migrantes, en especial el de menores de edad que viajan sin acompañantes.