El alcalde del poblado de Álvaro Obregón en el estado mexicano de Michoacán y cuatro policías fueron arrestados en relación con el asesinato de 10 personas que posteriormente fueron quemadas.
El gobernador del Estado, Silvano Aureoles, dijo que inicialmente las autoridades creyeron que el hallazgo de los 10 cadáveres estaba relacionado con el robo de gasolina en oleoducto que pasa por la localidad de Cuitzeo, pero pronto descubrieron vínculos con el alcalde Juan Carlos Arreygue.
La fiscalía aseguró que luego de ser detenidas 10 personas, el alcalde dio la orden de llevarlos a Álvaro Obregón donde fueron asesinados y sus cuerpos transportados a una propiedad en Cuitzeo donde fueron quemados.
Se cree que el motivo fue la rivalidad fue la rivalidad que había entre el jefe del grupo y algunos familiares del alcalde por la venta de droga al menudeo.
Michoacán es uno de los estados más convulsionados por la violencia de las drogas.