El actor también resultó usando joyas y accesorios femeninos, como parte de su preparación para interpretar a un homosexual que oculta su inclinación.
La actriz galesa, Catherine Zeta-Jones quedó sorprendida cuando llegó a su casa y encontró a su esposo, el veterano actor estadounidense Michael Douglas, usando su ropa intima y diamantes.
"Michael se encerraba en el dormitorio y se ponía mis diamantes y otras joyas. Me quedé estupefacta y tuve que decirle: 'Michael, por favor, quítate mi ropa interior ahora mismo. Ven, dame mis joyas ya'", confesó la actriz al diario Daily Star.
Pero Zeta-Jones mantuvo la calma, pues Douglas se encuentra sumergido completamente en el mundo femenino para interpretar su próximo papel en la película 'Behind the Candelabra', en la que encarnará a Liberace, uno de los artistas gay más representativos de los años 60 y 70.
El actor de 67 años también ha tenido que aprender a tocar perfectamente el piano, por lo que practica intensamente en su casa y Catherine ha tenido que acostumbrarse a no vivir con su esposo sino con Liberace.
"Me guiña el ojo cuando toca el piano, lo que me hace gracia. Pero empiezo ya a hartarme de tener que desayunar con Liberace y sobre todo, junto a un extraño", dijo jocosamente la actriz al diario Daily Star.
Catherine Zeta-Jones se encuentra feliz de que su marido y padre de sus dos hijos haya regresado nuevamente a la pantalla grande luego de terminar su tratamiento contra el cáncer de garganta.
"Michael se encerraba en el dormitorio y se ponía mis diamantes y otras joyas. Me quedé estupefacta y tuve que decirle: 'Michael, por favor, quítate mi ropa interior ahora mismo. Ven, dame mis joyas ya'", confesó la actriz al diario Daily Star.
Pero Zeta-Jones mantuvo la calma, pues Douglas se encuentra sumergido completamente en el mundo femenino para interpretar su próximo papel en la película 'Behind the Candelabra', en la que encarnará a Liberace, uno de los artistas gay más representativos de los años 60 y 70.
El actor de 67 años también ha tenido que aprender a tocar perfectamente el piano, por lo que practica intensamente en su casa y Catherine ha tenido que acostumbrarse a no vivir con su esposo sino con Liberace.
"Me guiña el ojo cuando toca el piano, lo que me hace gracia. Pero empiezo ya a hartarme de tener que desayunar con Liberace y sobre todo, junto a un extraño", dijo jocosamente la actriz al diario Daily Star.
Catherine Zeta-Jones se encuentra feliz de que su marido y padre de sus dos hijos haya regresado nuevamente a la pantalla grande luego de terminar su tratamiento contra el cáncer de garganta.