El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Michael Flynn, discutió en privado las sanciones estadounidenses contra Rusia con el embajador de Moscú en Estados Unidos durante el mes previo a la toma de posesión del presidente Donald Trump, según informó el Washington Post.
El Post dijo que algunos altos funcionarios estadounidenses interpretaron los contactos como una señal "potencialmente ilegal" para Rusia de que podría esperar un alivio a las sanciones impuestas por la administración del presidente Barack Obama en diciembre.
Reuters no pudo confirmar inmediatamente el informe del Washington Post.
Reuters informó el mes pasado, citando a tres fuentes familiarizadas con el asunto, que Flynn había mantenido cinco llamadas telefónicas con el embajador ruso, Sergei Kislyak, el 29 de diciembre, el día en que el entonces presidente Obama tomó represalias por la supuesta interferencia de Moscú en la elección presidencial estadounidense de 2016.
El Post dijo que Flynn negó el miércoles haber discutido las sanciones con el embajador ruso, pero que el jueves, a través de un portavoz, “indicó que, si bien no se recordaba de discutir las sanciones, no podía estar seguro de que el tema nunca llegó”.
Según el periódico, funcionarios dijeron esta semana que el FBI continúa examinando los contactos de Flynn con Kislyak.
“Varios funcionarios enfatizaron que si bien se discutieron las sanciones, no vieron pruebas de que Flynn tuviera la intención de transmitir una promesa explícita de tomar medidas después de la investidura [de Trump]”, dijo el Post.