Desde que estuvo hospitalizado por una infección, el ex presidente sudafricano, y premio Nóbel de la Paz, Nelson Mandela, casi no recibe visitas. Sin embargo, el ex líder anti-Apartheid, de 92 años de edad, hizo una excepción para reunirse con la primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, quien visita Sudáfrica en el inicio de una gira que concluirá en Botswana.
Mandela recibió a Michelle Obama en su residencia, en Johanesburgo, para un encuentro privado.
Posteriormente, la primera dama estardounidense dio un discurso en Soweto, ante una conferencia de jóvenes líderes africanas, donde exhortó a las jóvenes a apoyarse e inspirarse en sus ancestros, para superar los problemas que enfrenta la sociedad actual.
La primera dama habló ante el Foro de Líderes Jóvenes Africanas en Soweto, patrocinado por Estados Unidos. El evento reúne a jóvenes de todo el África Subsahariana, tanto líderes de la sociedad, como aquellas que están involucradas en iniciativas sociales o económicas en sus países.
Durante el encuentro Michelle Obama dijo a las asistentes que ellas representan el futuro de África y que son las “herederas de la sangre, el sudor y el sacrificio” de sus pueblos.
También señaló que su generación puede ser la que ponga fin a la epidemia del Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) y el Síndrome de la Inmunodeficiencia Humana Adquirida (SIDA), y utilizó el lema de campaña de su esposo “sí se puede” para inspirar a las jóvenes.
La esposa del presidente Barack Obama viaja acompañada de sus dos hijas Malía y Sasha, de su madre Marian Robinson, además de dos sobrinos.
Después de visitar Sudáfrica, la primera dama estadounidense visitará Botswana, a donde llegará el sábado en la etapa final de su viaje.