Migrantes venezolanos que viven en un campamento improvisado en la Ciudad de México siguen de cerca las noticias sobre lo que sucede en su país. El fin de semana, Venezuela celebró sus elecciones presidenciales donde el máximo tribunal electoral pronunció como ganador a Nicolás Maduro.
Los venezolanos que han recorrido varios países caminando y están a la espera de asilo en Estados Unidos, se muestran preocupados por la incertidumbre política y creen que podría profundizar la crisis humanitaria.
La caída en los precios del petróleo, la escasez de alimentos, el aumento desmedido de precios y el malestar social derivó en una migración masiva. Más de 7,7 millones de personas han abandonado Venezuela en la última década.