"El mundo ha perdido a una de las grandes campeonas de la libertad (...) Estados Unidos ha perdido a una verdadera amiga" dice Obama en un comunicado.
Genio y figura hasta la sepultura, dice el dicho, y en el caso de Margaret Thatcher, la exprimera ministra británica fallecida el lunes de un derrame cerebral, no podía ser de otra manera.
Amada por muchos y odiada por otros, la Dama de Hierro no era el tipo de mujer que podía dejar a nadie indiferente.
"Muy pocos líderes logran cambiar no sólo el panorama político de su país, sino también del mundo. Margaret fue una líder de ese tipo", dijo Tony Blair, líder del Partido Laborista que llevó a su partido al poder siguiendo las lecciones del "thatcherismo".
Mijail Gorbachov, el líder soviético sobre quien Thatcher aseguró que "podría hacer negocios", dijo que su entendimiento mutuo "contribuyó a un cambio en la atmósfera entre nuestro país y Occidente y al fin de la Guerra Fría".
"El mundo ha perdido a una de las grandes campeonas de la libertad, y Estados Unidos ha perdido a una verdadera amiga", dijo el presidente Barack Obama.
"Aquí, en Estados Unidos, muchos de nosotros nunca nos olvidaremos de su postura hombro con hombro con el presidente Reagan, recordando al mundo que no estamos simplemente arrastrados por las corrientes de la historia, (sino que) podemos darles forma con convicción moral, inquebrantable coraje y voluntad de hierro", agregó.
Tatcher fue la primera mujer en ser Primera Ministra y la que más tiempo estuvo en su puesto, desde 1979 hasta 1990.
Fue un periodista soviético quien la llamó la "Dama de Hierro", mote que describía fielmente su personalidad y liderazgo, así como su estilo político de muy pocos compromisos.
Hija de un almacenero, con una determinación de hierro, fue amada y rechazada por igual al aplastar a los sindicatos y privatizar grandes partes de la industria británica, en lo que se llamó el "tatcherismo".
La reina Isabel dijo que estaba triste de recibir la noticia de su muerte y envió un mensaje de condolencias a su familia.
Thatcher había sufrido una serie de problemas de salud en los últimos años, incluyendo derrames cerebrales previos y demencia senil. En diciembre de 2012 fue sometida a una operación para removerle un pólipo en la vejiga.
El Gobierno británico dijo que realizará una ceremonia fúnebre con honores militares para la ex primera ministra, aunque no será un funeral de Estado, en línea con los deseos de su familia.
Se realizará en la Catedral de St. Paul el próximo 17 de abril.
Amada por muchos y odiada por otros, la Dama de Hierro no era el tipo de mujer que podía dejar a nadie indiferente.
"Muy pocos líderes logran cambiar no sólo el panorama político de su país, sino también del mundo. Margaret fue una líder de ese tipo", dijo Tony Blair, líder del Partido Laborista que llevó a su partido al poder siguiendo las lecciones del "thatcherismo".
Mijail Gorbachov, el líder soviético sobre quien Thatcher aseguró que "podría hacer negocios", dijo que su entendimiento mutuo "contribuyó a un cambio en la atmósfera entre nuestro país y Occidente y al fin de la Guerra Fría".
"El mundo ha perdido a una de las grandes campeonas de la libertad, y Estados Unidos ha perdido a una verdadera amiga", dijo el presidente Barack Obama.
"Aquí, en Estados Unidos, muchos de nosotros nunca nos olvidaremos de su postura hombro con hombro con el presidente Reagan, recordando al mundo que no estamos simplemente arrastrados por las corrientes de la historia, (sino que) podemos darles forma con convicción moral, inquebrantable coraje y voluntad de hierro", agregó.
Tatcher fue la primera mujer en ser Primera Ministra y la que más tiempo estuvo en su puesto, desde 1979 hasta 1990.
Fue un periodista soviético quien la llamó la "Dama de Hierro", mote que describía fielmente su personalidad y liderazgo, así como su estilo político de muy pocos compromisos.
Hija de un almacenero, con una determinación de hierro, fue amada y rechazada por igual al aplastar a los sindicatos y privatizar grandes partes de la industria británica, en lo que se llamó el "tatcherismo".
La reina Isabel dijo que estaba triste de recibir la noticia de su muerte y envió un mensaje de condolencias a su familia.
Thatcher había sufrido una serie de problemas de salud en los últimos años, incluyendo derrames cerebrales previos y demencia senil. En diciembre de 2012 fue sometida a una operación para removerle un pólipo en la vejiga.
El Gobierno británico dijo que realizará una ceremonia fúnebre con honores militares para la ex primera ministra, aunque no será un funeral de Estado, en línea con los deseos de su familia.
Se realizará en la Catedral de St. Paul el próximo 17 de abril.