La Procuraduría General de la República informó que atrajo las investigaciones por el fallecimiento de dos estudiantes en el estado de Guerrero.
El pasado lunes, 12 de diciembre de 2011, dos estudiantes muertos y unos 20 heridos, fue el saldo de la acción en la que elementos de las fuerzas federales y del Estado desalojaron a alumnos de la Escuela Normal Rural que bloqueaban la Autopista del Sol.
La intervención de la Policía Federal, Estatal y Municipal se desarrolló luego que presuntamente los estudiantes empezaron a quemar llantas de vehículos e incendiaron una bomba de gasolina de un puesto de abastecimiento en el lugar de la protesta.
Diez policías son investigados por este desalojo.
El gobernador Ángel Aguirre Rivero descartó la posibilidad de solicitar licencia para separarse del cargo y dejó entrever que hay personas interesadas en desestabilizar su mandato, por estos hechos. Y añadió tener la conciencia tranquila.
“El gobernador ni le ordenó a los cuerpos policíacos que fueran armados ni mucho menos que se hicieran disparos, soy el primero, el más interesado en que esto se investigue, en que se llegue al fondo y no quede en la impunidad, dejemos que esto fluya”, declaró Aguirre.
Tras los acontecimientos, Alberto López Rosas y Ramón Almonte Borja dejaron sus puestos en la Procuraduría General de Justicia y la Secretaría de Seguridad Pública del Estado.