La cifra de muertos por el intento de golpe de estado en Turquía subió a 265, hay más de 1000 heridos y unos 3000 militares fueron detenidos.
Entre los fallecidos hay 161 civiles y miembros de las fuerzas de seguridad fieles al Gobierno, además murieron 104 golpistas, según círculos gubernamentales.
El primer ministro del país, Binali Yildirim, aseguró que la situación vuelve a estar bajo control.
Según la agencia estatal de noticias Anadolu, las operaciones para detener a los soldados golpistas en el cuartel general del Ejército en Ankara concluyeron.
El jefe de los servicios secretos de Turquía, Hakan Fidan, declaró que la operación contra los golpistas concluyó en líneas generales aunque advirtió que algunas operaciones aisladas continuarán durante unas horas.
Hasta el momento fueron detenidos 2839 golpistas pertenecientes a las Fuerzas Armadas y fueron apartados de sus puestos cinco generales y 29 coroneles.