Nuevo supercohete de la NASA

Hasta ahora Marte sólo ha sido visitado por robots enviados desde la Tierra.

Podría transportar más del doble de la carga que llevaban los trasbordadores y haría posible llevar al hombre hasta Marte.

La agencia espacial de EE.UU., la NASA, dio a conocer su plan de construir un gigantesco cohete que podrá llevar astronautas más allá de la Estación Espacial Internacional, incluso a Marte.

El nuevo cohete, nombrado con las siglas SLS, que en inglés significan Sistema de Lanzamiento Espacial, incorporará componentes y tecnología de los transbordadores y del ya desaparecido programa Constellation.

A un costo inicial de $10.000 millones de dólares, el SLS utilizará una mezcla de combustible de hidrógeno y oxígeno líquidos y tiene previsto realizar su primer vuelo de prueba en 2017 y vuelos tripulados para 2021, según dijo el jefe de la NASA, Charles Bolden.

La NASA prevé gastar además otros $6.000 millones en la construcción de una cápsula tripulada Orión para la exploración espacial a grandes distancias, y $2.000 millones para renovar el puerto espacial que acogerá al nuevo cohete en el Centro Kennedy en Florida.

A diferencia de los trasbordadores, ya retirados de servicio y que sólo podían transportar hasta una órbita a unos 480 kilómetro de la Tierra alrededor de 25 toneladas de peso, el nuevo cohete podría llevar casi 70 toneladas de carga.

Bolden dijo que el "nuevo sistema de lanzamiento creará puestos de trabajo bien remunerados en Estados Unidos, mantendrá el liderazgo estadounidense en el espacio y será inspiración de millones de personas en todo el mundo".

Se trataría del sistema de lanzamiento más potente visto hasta ahora desde el Saturno V del que se valieron los tripulantes de la misión Apolo para llegar a la Luna hace más de cuatro décadas.

El director de la NASA dijo que la agencia está "invirtiendo en tecnologías para vivir y trabajar en el espacio, y preparando el escenario para visitar los asteroides y Marte".

El presidente Barack Obama manifestó el año pasado sus aspiraciones de que la NASA envíe un vuelo a un asteroide en 2025 y realice su primera misión al Planeta Rojo en 2030.