Los pasajeros en un vuelo comercial desde San Francisco a Hong Kong pudieron ver un misil balístico intercontinental norcoreano volando a través del cielo de noviembre, dijo el secretario de Estado estadounidense Rex Tillerson en una reunión de ministros de Relaciones Exteriores en Vancouver, Canadá, destacando lo que llamó la "imprudencia" del régimen de Kim Jong Un.
Corea del Norte disparó lo que dijo era un ICBM de prueba el 28 de noviembre. De acuerdo con la Administración Federal de Aviación, la aerolínea comercial estaba a 280 millas náuticas del punto de impacto. En ese momento, dijo, había otros nueve vuelos dentro de ese rango.
"En el transcurso de ese día, según el Departamento de Defensa, se calcula que 716 vuelos pasarían dentro de ese rango. La FAA dice que el total de asientos disponibles en esos 716 vuelos fue de 152.110. Esa es una gran cantidad de personas de una gran cantidad de vuelos que se ponen en riesgo por una prueba irresponsable de misiles balísticos", dijo Tillerson, enfatizando que la posibilidad de que un misil norcoreano o partes de él afecten a un avión civil es real.
Tillerson no dijo de qué aerolínea se trataba cuando los pasajeros vieron fueron testigos de la prueba de un ICBM, o si el avión cambió su ruta como resultado.
"Sobre la base de su imprudencia pasada", dijo Tillerson, "no podemos esperar que Corea del Norte tenga ninguna consideración por lo que se le pueda atravesar en el camino a uno de sus misiles, o partes de un misil que se rompe".
El aleccionador recuerdo de Tillerson marcó la reunión de los principales diplomáticos de 20 países que buscan formar un frente unido a lo que se percibe como la agresión nuclear de Pyongyang.
El secretario de Estado señaló que el mundo se encuentra en una "etapa tenue", considerando cuánto han avanzado recientemente los esfuerzos nucleares de Corea del Norte. Tillerson dijo que Estados Unidos y otras naciones están "resueltos" a que Corea del Norte nunca se convierta en una potencia nuclear.
Sanciones
Coauspiciadao por Canadá para los aliados de Estados Unidos en la Guerra de las Corea, la reunión de Vancouver busca formas de evitar la amenaza de conflicto con una Corea del Norte con armas nucleares. Durante la Guerra de Corea de 1950 a 1953, los países participantes en la reunión de Vancouver enviaron tropas o ayuda humanitaria bajo un esfuerzo de la ONU para repeler al Norte.
En una declaración conjunta, las naciones acordaron considerar y tomar medidas para imponer sanciones unilaterales y otras acciones diplomáticas que van más allá de las requeridas por las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
Washington también pidió a las naciones que tomen medidas para fortalecer las operaciones globales de interdicción marítima para frustrar las actividades ilícitas de Corea del Norte.
"Hoy discutimos formas de aumentar aún más la presión sobre Corea del Norte a través de una implementación y cumplimiento de sanciones más efectivas. Y los países presentaron propuestas sobre cómo piensan hacerlo. Acordamos que la necesidad de que los estados miembros de la ONU, especialmente China y Rusia, implementen completamente las sanciones acordadas es esencial para su éxito. Discutimos la importancia de trabajar juntos para contrarrestar la evasión y el contrabando tal como lo demandan las sanciones", dijo Tillerson en una conferencia de prensa conjunta con la canciller canadiense Chrystia Freeland.
La principal diplomática canadiense advirtió al mundo que no deje engañar por Corea del Norte.
"Aplaudimos al acuerdo de la semana pasada entre Corea del Norte y Corea del Sur para celebrar discusiones entre militares y para que Corea del Norte participe en las Olimpiadas de Invierno del próximo mes. Estas son señales alentadoras. Pero que quede claro, no se puede avanzar en la solución de la inestabilidad en la península de Corea hasta que Corea del Norte se comprometa a cambiar el rumbo y abandone de manera verificable e irreversible todas sus armas de destrucción masiva", dijo Freeland.
Las conversaciones ministeriales del martes se producen pocos días después de que una alerta errónea de misiles desató el pánico en Hawai.
"Además, debemos aumentar los costos del comportamiento del régimen hasta el punto de que Corea del Norte debe llegar a la mesa para sostener negociaciones creíbles", dijo Tillerson durante la apertura de las conversaciones.