El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, inicia un impulso diplomático para revivir un acuerdo nuclear de 2015 entre Irán y las potencias mundiales. Los partidarios del acuerdo dicen que Biden necesitará un esfuerzo a largo plazo para tener éxito, mientras que los oponentes sostienen que debería concentrarse en presionar a Teherán para que adopte una nueva estrategia para implementar un trato más fuerte.
El acuerdo de 2015, conocido como el Plan de Acción Integral Conjunto (JCPOA) fue alcanzado entre Irán y los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas más Alemania, conocido como P5 + 1. El tratado requiere que Irán emprenda restricciones de ocho a 15 años en las actividades nucleares con potencial de armamento a cambio de alivio de sanciones internacionales.
El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, se retiró del acuerdo en 2018 diciendo que no era lo suficientemente duro para Irán. Los iraníes por su lado, en represalia, decidieron en 2019 exceder los límites nucleares del acuerdo.
"Estamos preparados para volver a entablar negociaciones con el P5 + 1 sobre el programa nuclear de Irán", dijo Biden el viernes en la Casa Blanca, en un discurso en una versión virtual de la Conferencia de Seguridad de Munich, un foro anual sobre política de seguridad internacional.
También lea Las claves del JCPOA, el acuerdo nuclear con IránBiden, quien se ha comprometido a regresar al JCPOA si Irán reanuda el cumplimiento total, respondió positivamente a una propuesta de la UE hecha el jueves para que las seis potencias mundiales e Irán asistan a una reunión informal para discutir cómo revivir el acuerdo. Un portavoz del Departamento de Estado dijo que Estados Unidos aceptaría tal invitación, que aún no se ha ofrecido públicamente.
La administración Biden también hizo dos gestos hacia Irán, retirando una solicitud de la administración Trump para que el Consejo de Seguridad de la ONU desencadenara un "retroceso" de las sanciones contra Irán, una solicitud que otros miembros del consejo rechazaron, y aliviando algunas restricciones de viaje para los diplomáticos iraníes que trabajan en la Organización de las Naciones Unidas en Nueva York.
¿Qué dice Irán?
El ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, respondió en Twitter reiterando la exigencia de que Estados Unidos "levante incondicional y efectivamente todas las sanciones [estadounidenses] impuestas o reimpuestas por Trump" desde 2018 como parte del plan que el exmandatario llamó como de "máxima presión" para que Irán ponga fin a los comportamientos objetables, incluido el supuesto desarrollo de armas nucleares, que Teherán niega.
Zarif dijo que Teherán “revertirá inmediatamente” todas sus violaciones al JCPOA si Estados Unidos cumple.
En una de varias entrevistas del servicio de la televisión persa de la VOA el viernes, el partidario del JCPOA Ali Vaez, un analista de Irán en el International Crisis Group, dijo que no será posible que Biden levante las sanciones de Estados Unidos a corto plazo debido a la resistencia a tal movimiento de la minoría republicana en el Congreso.
También dijo que es poco probable que los gestos de Estados Unidos convenzan a Irán de que abandone la amenaza de detener las inspecciones no anunciadas de la Agencia Internacional de Energía Atómica de la ONU en sitios nucleares iraníes a partir del martes, una medida que intensificaría aún más la reciente serie de violaciones del JCPOA por parte de Irán.
“Al mismo tiempo, [para Biden] expresar su voluntad de tener un diálogo con Irán es un importante paso adelante para que ambas partes encuentren un terreno común para revivir el JCPOA y mostrar que la era de la 'máxima presión' ha terminado”, dijo Vaez.
Behrooz Bayat, un exconsultor iraní de la AIEA con sede en Viena y partidario del JCPOA, dijo que Estados Unidos, otras potencias mundiales e Irán no tienen otra alternativa que salvar al JCPOA a largo plazo.
"La persecución de otras políticas, como que Estados Unidos mantenga las sanciones de 'máxima presión' paralizantes para Irán, o que Irán avance en su programa nuclear, no resolverá nada y podría terminar en una guerra", dijo Bayat.
Biden ha dicho que su propuesta de regreso condicional al JCPOA tras la reanudación del pleno cumplimiento por parte de Irán sería un primer paso hacia el fortalecimiento y la ampliación del acuerdo para abordar lo que Estados Unidos considera las actividades desestabilizadoras de Irán en el Medio Oriente, incluido su apoyo a las milicias islamistas que han luchó contra Estados Unidos y sus aliados regionales.
El director de investigación de Brookings Institution, Michael O'Hanlon, un crítico del JCPOA, dijo que Biden debería usar la influencia financiera que Trump construyó con sanciones estadounidenses más estrictas para tratar de obtener un nuevo acuerdo que restrinja indefinidamente el enriquecimiento de uranio de Irán y otras actividades nucleares que podría convertir en armas.
“A Irán no le va a gustar esa idea. Pero existe la posibilidad de que al menos a algunos republicanos en Estados Unidos les guste eso, creando una base más sólida para que este sea un acuerdo duradero y, lo que es más importante, apuntalando el sistema de no proliferación nuclear en el Medio Oriente”, opinó O'Hanlon.
Otro crítico del JCPOA, Behnam Ben Taleblu, de la Fundación para la Defensa de las Democracias, dijo que Biden debería presionar a Irán para que avance con un primer paso hacia la reactivación de la diplomacia cambiando su comportamiento en casa, así como el de sus milicias que han organizado ataques en los últimos años contra las fuerzas estadounidenses en Irak y los aliados de Estados Unidos, Israel y Arabia Saudita.
“Washington debería trabajar con sus socios regionales tan diversos como Israel o Arabia Saudita para ver lo que ellos favorecen como un estado final aceptable [para sus conflictos con Irán y sus representantes], de modo que las aportaciones de esos aliados estadounidenses se incluyan en un mejor y más amplio trato con Irán”, dijo Taleblu.
[Este artículo se originó en el servicio persa de la VOA. Contribuyó Katherine Ahn ]