Obama niega tener mano suave

Barack Obama dijo respecto a Irán que todas las opciones están sobre la mesa.

El presidente de EE.UU. refuta acusaciones de los republicanos que tildan de blanda su polìtica exterior.

El presidente Barack Obama rechazó la acusación hecha por los republicanos de que su política exterior se basa en la contemporización y para refutarlo citó, entre otras pruebas, la muerte a manos de fuerzas especiales estadounidenses del jefe de al-Qaeda, Osama Bin Laden.

Obama respondió este jueves en la Casa Blanca a preguntas de los periodistas acerca de la situación con Irán y la crisis financiera en Europa.

Cuando se le preguntó sobre las declaraciones hechas por los aspirantes a la nominación presidencial republicana de que su política exterior era blanda, el presidente destacó que bin Laden y más de otros 20 cabecillas de al-Qaeda fueron muertos o han sido capturados durante su administración.

Respecto a Irán, Obama destacó que EE.UU. está “considerando todas las opciones” para impedir que ese país adquiera armas nucleares.

Sobre la crisis financiera en Europa, señaló que los países de ese continente son lo suficientemente ricos como para dar solución a sus problemas si logran aunar voluntades políticas, y resaltó la importancia de que defiendan el euro.

También reiteró que si Europa falla en resolver la crisis de la deuda, el impacto podría afectar severamente la capacidad de EE.UU. para generar nuevas fuentes de trabajo.