El presidente Barack Obama dijo que el derribamiento de un avión de combate ruso en la frontera entre Siria y Turquía el martes es evidencia del "problema que existe" con las operaciones militares rusas en Siria, y agregó que "Turquía tenía derecho a defender su territorio y espacio aéreo".
Durante una conferencia de prensa conjunta con el presidente francés Francois Hollande, Obama dijo que la información sobre el derribamiento del Su-24 ruso por parte de Turquía, todavía se está recolectando, pero destacó que aviones militares rusos están atacando a grupos de oposición moderados sirios muy cercanos a las fronteras de Turquía.
El mandatario estadounidense instó a los dos países a "tomar medidas para desalentar una escalada de la situación", y dijo que el incidente demostró que se necesita trabajar rápidamente hacia una resolución diplomática del conflicto sirio.
Horas antes, el presidente ruso Vladimir Putin acusó a Turquía de "apuñalar a Rusia por la espalda" y apoyar el terrorismo, después que aviones turcos F16 derribaron el jet ruso.
Ankara dijo que el avión ruso fue derribado después de que violó el espacio aéreo turco e hizo caso omiso de 10 advertencias que se le hicieron durante cinco minutos para que se retirara.
El portavoz militar de Estados Unidos en Bagdad, coronel Steve Warren, confirmó que los pilotos turcos hicieron reiteradas advertencias al avión ruso y no recibieron respuesta. El ejército estadounidense “pudo oír todo lo que estaba pasando" en la comunicación entre los pilotos turcos y rusos antes de que los primeros derribaran el avión de los segundos, dijo Warren.
Sin embargo, el portavoz militar dijo que no estuvo inmediatamente claro de qué lado de la frontera estaba volando el avión ruso.
Moscú insiste que su avión nunca salió del espacio aéreo sirio.