El presidente Barack Obama y los líderes del Congreso estadounidenses celebraron en el Capitolio los 150 años de la ratificación de la enmienda de la Constitución que puso fin a la esclavitud en Estados Unidos.
En un emotivo discurso, el presidente Obama dijo este miércoles que las “cicatrices de nuestro pecado original” –la esclavitud y el fanatismo racial—todavía están presentes en Estados Unidos a pesar haber pasado 150 años desde la aprobación de la 13ª Enmienda a la Constitución, por la que se abolió la esclavitud.
El acto tuvo lugar en Capitolio de la nación con la presencia de miembros tanto del Senado como de la Cámara de Representantes.
La 13ª Enmienda fue aprobada por el senado el 8 de abril de 1864 y por la Cámara en enero del año siguiente, y ratificada por el número requerido de estados el 6 de diciembre de 1865.
El presidente comenzó citando a Abraham Lincoln, quien dijo que “al dar libertad a los esclavos aseguramos la libertad para los libres”, para subrayar la importancia de esta y otros medidas que debieron haber culminado con la aprobación de la Ley de los Derechos Civiles.
Sin mencionar al candidato presidencial republicano Donald Trump por su nombre, Obama se refirió a las manifestaciones xenófobas que se han escuchado en la campaña presidencial, diciendo que la “intolerancia en todas sus formas traiciona” la noble lucha por los derechos que garantizan la igualdad de todos los seres humanos e instó a los estadounidenses a luchar contra ella.
“En Estados Unidos, podemos crear el cambio que buscamos”, dijo Obama. “Todo lo que se necesita es que nuestra generación esté dispuesta a hacer lo que hicieron los que vinieron antes: superar el cinismo y el miedo, aferrarnos a nuestros valores, a vernos reflejados en los demás...recordar que nuestra libertad está ligada a la de los demás, no importa su apariencia, de donde vengan o cuál es su apellido o qué credo practican, a ser honorables en lo que damos y en lo que preservamos, a conservar noblemente o perder mezquinamente la última esperanza de la tierra. Es nuestra elección. Hoy reafirmamos nuestra esperanza”.
El discurso del presidente fue antecedido por los del jefe de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, quien habló sobre la aprobación de la 13ª Enmienda, y el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan quien hizo notar que 650.000 vidas fueron perdidas en la Guerra Civil para hacer reales las 43 palabras de la Enmienda.