Un grupo de expertos convocado por la Organización Mundial de la Salud dijo el martes que “apoya firmemente el acceso urgente y generalizado” a las vacunas de refuerzo contra el COVID-19, en un cambio de postura después de afirmar el año pasado que no eran necesarias.
La OMS explicó en un comunicado que su grupo de expertos concluyó que la inmunización con las vacunas autorizadas contra el COVID-19 proporcionan altos niveles de protección contra una enfermedad severa y la muerte en momentos en aún persiste la propagación de la contagiosa variante ómicron.
El organismo de la ONU mantuvo hasta hace poco que los refuerzos no eran necesarios en las personas saludables y contribuían a la desigualdad en la distribución de vacunas.
En enero, la OMS comenzó a recomendar los refuerzos cuando los países tuvieran suficientes suministros y después de que hubieran protegido a sus sectores más vulnerables.
Señaló que las vacunas, incluido el uso de los refuerzos, es especialmente importante para las personas en riesgo de sufrir una enfermedad severa.
Las recomendaciones anunciadas el martes surgieron de un grupo asesor de 18 miembros enfocado en el impacto de las “variantes de preocupación”, como ómicron, y en evaluar la efectividad de las vacunas contra esas mutaciones.
Numerosos estudios científicos han mostrado que los refuerzos con las vacunas autorizadas contribuyen a restaurar una inmunidad debilitada y a proteger contra un caso grave de COVID-19.
A los programas de aplicación de los refuerzos en países ricos como Gran Bretaña, Canadá y Estados Unidos, se les atribuye haber impedido que la ola de infecciones de ómicron desbordaran los hospitales y los cementerios.
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