Ante temores de que el presidente electo Donald Turmp pueda cambiar dramáticamente la política de Estados Unidos sobre el Medio Oriente, representantes de más de 70 países y organizaciones internacionales afirmaron que la solución de dos estados es la única viable para la paz.
Tras una reunión en París, el domingo, a la que ni israelíes ni palestinos asistieron, el presidente francés, François Hollande, desestimó a opositores y cínicos que ya la habían descartado como un fracaso, sugiriendo que el simbolismo y el mensaje son igualmente importante.
“Sé lo que se dijo de esta conferencia, que podría ser ingenua, ¿Cómo podría ser posible imaginar la paz hoy cuando el Medio Oriente se está desintegrando? Se dijo aún que no tenía sentido y estábamos agregando muy poco a las relaciones internacionales al realizar esta conferencia aquí. Bueno puedo decirles que sería muy ingenuo creer que juntar a Israel y sus vecinos, algo tan necesario, fuera posible sin avanzar hacia el proceso”, dijo Hollande.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, calificó las conversaciones de París como inútiles y partidarios israelíes realizaron una pequeña manifestación contra la reunión el domingo por la mañana.
Zvi Haddad, un manifestante pro Israel señaló que: “Hay un lenguaje ambiguo sobre Francia porque escucho a menudo a François Hollande que una resolución provendrá de una negociación directa y hoy hay una conferencia donde ni israelíes ni palestinos asisten, entonces no entiendo que propósito tiene. Quizás hay otra agenda detrás de esto, puede ser electoral o para el futuro de Hollande cuando deje la presidencia. No lo sé. En cualquier caso esta conferencia no tiene sentido y estamos aquí en solidaridad con el estado de Israel”.
La conferencia del domingo fue la segunda organizada por París en menos de un año, y la declaración final dijo que se realizará otra hacia fines de 2017.
La reunión tuvo lugar cuando la administración Obama finaliza ocho años sin éxito en hacer avanzar el proceso de paz.
Algunos temen ahora que la posición aparentemente más amistosa hacia los asentamientos israelíes y la promesa de mudar la embajada de Estados Unidos a Jerusalén pueda poner en peligro la opción de dos estados. Un comunicado final de la conferencia no criticó específicamente la promesa de Trump de cambiar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén.