El partido gobernante del primer ministro de Rusia, Vladimir Putin, sufrió sorpresivas y amplias pérdidas de bancas parlamentarias en las elecciones primarias dando al partido del hombre que ha dominado la política rusa por más de una década, una reducida mayoría.
Con el 96% de los votos contados, el partido Rusia Unida estaría asegurando unas 238 bancas en la cámara baja del parlamento (Duma) de 450 bancas, una caída pronunciada desde las 315 bancas que había obtenido en 2007. La oposición sostiene que la mayoría de bancas logradas por el oficialismo responden a fraude electoral.
Los resultados proyectados muestra que el partido de Putin perdió más de dos tercios de la súper mayoría en el parlamento que le habían dado a Rusia Unida la capacidad de cambiar la constitución en forma unilateral.
Los comunistas junto con los nacionalistas de la Democracia Liberal y el partido social demócrata Solamente Rusia lograron avanzar en la cantidad de bancas que ganaron, lo que significa que el partido de Putin se verá forzado a trabajar para con al menos uno de los partidos de oposición que se ha visto fortalecido en las elecciones.
La comisión central electoral informó este lunes 5 de diciembre de 2011 que Rusia Unida ha ganado 49,5% de los votos, una profunda retracción comparado con el 64% de 2007. El partido comunista de Gennadi Zyuganov quedó en un lejano segundo lugar con 20%, un ascenso de más de 12% comparado con la pasada elección.
En las últimas semanas los analistas rusos habían adelantado una profunda caída en la intención de votos por el partido gobernante, debido al descontento de los votantes con la creciente brecha entre ricos y pobres en Rusia y las acusaciones de corrupción en el gobierno.
Sin embargo, Putin dijo que Rusia Unida ha reafirmado “ser la fuerza política líder en la nación” y que el resultado “asegura el desarrollo estable” del país.
La policía rusa detuvo a más de 100 activistas de la oposición durante las manifestaciones que se produjeron en Moscú. Decenas más fueron detenidos en San Petesburgo.
Durante la votación, el único observador independiente de las elecciones, Golos, dijo a la Voz de América, que la policía había bloqueado el acceso a algunos de los inspectores en diferentes lugares de votación.
El partido gobernante del primer ministro de Rusia, Vladimir Putin, sufrió sorpresivas y profundas pérdidas en las elecciones primarias dando al partido del hombre que ha dominado la política rusa por más de una década, una reducida mayoría.
Con el 96% de los votos contados, el partido Rusia Unidas estaría asegurando unas 238 bancas en la cámara baja del parlamento (Duma) de 450 bancas, una caída pronunciada desde las 315 bancas que había obtenido en 2007.
De todas maneras, la oposición sostiene que las bancas logradas por el oficialismo responden a fraude electoral.
Los resultados proyectados muestra que el partido de Putin perdió más de dos tercios de la súper mayoría en el parlamento que le habían dado a Rusia Unida la capacidad de cambiar la constitución en forma unilateral.
Los comunistas junto con los nacionalistas de la Democracia Liberal y el partido social demócrata Solamente Rusia lograron avanzar en la cantidad de bancas que ganaron, lo que significa que el partido de Putin se verá forzado a trabajar para con al menos uno de los partidos de oposición que se ha visto fortalecido en las elecciones.
La comisión central electoral informó este lunes 5 de diciembre de 2011 que Rusia Unida ha ganado 49,5% de los votos, una profunda retracción comparado con el 64% de 2007. El partido comunista de Gennadi Zyuganov quedó en un lejano segundo lugar con 20%, un ascenso de más de 12% comparado con la pasada elección.
En las últimas semanas los analistas rusos habían adelantado una profunda caída en la intención de votos por el partido gobernante, debido al descontento de los votantes con la creciente brecha entre ricos y pobres en Rusia y las acusaciones de corrupción en el gobierno.
Sin embargo, Putin dijo que Rusia Unida ha reafirmado “”ser la fuerza política líder en la nación” y que el resultado “asegura el desarrollo estable” del país.
La policía rusa detuvo a más de 100 activistas de la oposición durante las manifestaciones que se produjeron en Moscú. Decenas más fueron detenidos en San Petesburgo.
Durante la votación, el único observador independiente de las elecciones, Golos, dijo a la Voz de América, que la policía había bloqueado el acceso a algunos de los inspectores en diferentes lugares de votación.