La paz en Irlanda del Norte es “sólida”, dijo el primer ministro británico, Gordon Brown, a pesar de los primeros ataques mortales contra soldados en esa región en 12 años.
Brown habló, el lunes, en Belfast, en momentos en que la policía realiza una intensa cacería por los atacantes que dieron muerte a dos soldados e hirieron a otros dos y dos civiles el sábado de noche en una base al norte de Belfast.
Decenas de tiros fueron disparados contra soldados y dos personas que entregaban pizzas a domicilio, antes de que huyeran los atacantes. Una división republicana irlandesa, el Verdadero ERI, se hizo responsable de los hechos.
El Verdadero ERI se opone al gobierno de poder compartido protestante católico que se produjo gracias a los acuerdos del Viernes Santo de 1998.
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