Perú: Científicos experimentan sembrar papas en Marte

En esta imagen, tomada el 16 de marzo de 2017, el científico peruano David Ramírez señala una planta de papas en un simulador con las condiciones de Marte, en Lima, Perú. En el seco suelo del desierto peruano, la esperanza de cultivar alimentos algún día en Marte crece en forma de planta de papa.

Al interior de un simulador construido en la Universidad de Ingeniería y Tecnología de Perú crece una "súper papa": un tubérculo que ha resistido a condiciones extremas como parte de un experimento que evalúa la posibilidad de su cosecha en Marte.

El aparato fue construido por el astro biólogo Julio Valdivia y sus alumnos. Aún no emula los niveles de gravedad marciana -que es equivalente a un tercio de la terrestre-, pero por el momento sí desciende hasta diez grados bajo cero.

Asimismo, la presión simula condiciones de 6.000 metros de altitud y posee un sistema de luces para imitar el día y la noche.

Cosechar papas en Marte -como lo hace Matt Damon en el filme The Martian (2015)- es uno de los proyectos más ambiciosos de científicos peruanos asociados con la NASA.

Sin embargo, para lograr una hazaña así, primero se tendría que encontrar una variedad de papa que pudiera sobrevivir al cultivo en invernaderos especiales en los desiertos fríos y secos del planeta rojo.

En esta foto del 16 de marzo de 2017, una planta de papa crece dentro de un simulador de Marte en Lima, Perú. El simulador imita las duras condiciones encontradas en Marte.

Aunque las posibilidades de lograrlo aún son inciertas, los investigadores creen que su experimento podría culminar con éxito si lograran conseguir los 100.000 dólares de presupuesto que requieren para seguir adelante con el proyecto.

Valdivia, un científico asociado al Centro de Investigación Ames de la NASA, reconoce que la mayor dificultad para seguir adelante con el experimento es el factor económico.

Según explica, construir el simulador costó 3.000 dólares, pero en Estados Unidos uno parecido costaría 500.000.

"Ha sido amor a la ciencia, porque finalmente queríamos tener resultados previos para poder buscar financiamiento en un proyecto más grande", afirma.

Por ahora, los científicos del Centro Internacional de la Papa y de la Universidad de Ingeniería y Tecnología de Perú ponen a prueba los límites de las "súper papas" a temperaturas bajo cero, presiones muy bajas y concentraciones de dióxido de carbono extremas.

"Estamos experimentando con altas concentraciones de dióxido de carbono (CO2) de entre 10% y 20% (en la Tierra solo tenemos 0.04)", dice el peruano David Ramírez, doctor en ecofisiología vegetal que integra el equipo investigador.

No obstante, reconoce que les falta incrementar la concentración de CO2 para llegar al nivel existente en la atmósfera de Marte, que es de 95%.