Al menos 1.1 millones de estadounidenses son portadores del virus, mientras que unos 200.000 no saben que han sido contagiados.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, destacó la importancia de la detección temprana del Virus de Inmunodeficiencia Humana en el marco del Día Nacional del Examen de VIH, en el que ofrecen pruebas gratis a los estadounidenses para detectar el virus.
En declaraciones públicas, Obama manifestó que 200 mil de los cerca de 1.1 millones de estadounidenses que son portadores del VIH, desconocen que tienen la enfermedad “y podría transmitirlo a otros sin saberlo”, alertó.
“Saber cuál es su status con respecto al VIH es un paso vital para acceder a un tratamiento que pueda extender las probabilidades de vida frente al VIH y gracias a las investigaciones actuales, ese tratamiento es más efectivo que nunca”, dijo Obama.
Por esta razón, el presidente resaltó la importancia del programa piloto que se lleva a cabo este jueves, en el que se ofrece a la población pruebas rápidas de VIH, en diferentes farmacias y comunidades rurales del país, sin costo alguno.
La prueba que consta de una vara de algodón que se coloca dentro de la boca, arroja un resultado un 99% confiable. En caso de resultar positivo, el paciente será remitido a un departamento de salud para confirmar el resultado con un examen de sangre y si es necesario brindar el tratamiento adecuado.
El proyecto, con un costo de $1,2 millones de dólares, hace parte de la estrategia Nacional para el VIH, que aplica Obama en su administración para mejorar el acceso a los servicios de salud y efectividad en los tratamientos del Sida.
Las autoridades de salud esperan incluir las pruebas dentro del servicio rutinario de la farmacia y posteriormente venderlo sin necesidad de receta médica, ya que los síntomas del VIH, pueden manifestarse hasta después de una década.
En declaraciones públicas, Obama manifestó que 200 mil de los cerca de 1.1 millones de estadounidenses que son portadores del VIH, desconocen que tienen la enfermedad “y podría transmitirlo a otros sin saberlo”, alertó.
“Saber cuál es su status con respecto al VIH es un paso vital para acceder a un tratamiento que pueda extender las probabilidades de vida frente al VIH y gracias a las investigaciones actuales, ese tratamiento es más efectivo que nunca”, dijo Obama.
Por esta razón, el presidente resaltó la importancia del programa piloto que se lleva a cabo este jueves, en el que se ofrece a la población pruebas rápidas de VIH, en diferentes farmacias y comunidades rurales del país, sin costo alguno.
La prueba que consta de una vara de algodón que se coloca dentro de la boca, arroja un resultado un 99% confiable. En caso de resultar positivo, el paciente será remitido a un departamento de salud para confirmar el resultado con un examen de sangre y si es necesario brindar el tratamiento adecuado.
El proyecto, con un costo de $1,2 millones de dólares, hace parte de la estrategia Nacional para el VIH, que aplica Obama en su administración para mejorar el acceso a los servicios de salud y efectividad en los tratamientos del Sida.
Las autoridades de salud esperan incluir las pruebas dentro del servicio rutinario de la farmacia y posteriormente venderlo sin necesidad de receta médica, ya que los síntomas del VIH, pueden manifestarse hasta después de una década.