El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, disolvió este miércoles por decreto la Asamblea Nacional, adelantando las elecciones legislativas y presidenciales, un día después de presentar su defensa ante la cámara en un juicio político en su contra.
"He firmado el Decreto Ejecutivo 741, con el objetivo de disolver la Asamblea Nacional y solicitar al CNE se convoque a elecciones", anunció el propio Lasso en redes sociales. "Esta es la mejor decisión para darle una salida constitucional a la crisis política y conmoción interna que soporta el Ecuador y devolver al pueblo ecuatoriano el poder de decidir su futuro en las próximas elecciones".
La Voz de América constató que la sede de la Asamblea Nacional está fuertemente militarizada por la Policía y miembros del ejército, que rodearon el edificio del Legislativo y no permitían la entrada.
En un comunicado divulgado en video, Neslon Proaño, Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas del Ecuador reafirmó el respaldo del ente militar a la Constitución y las leyes del país "de proteger los derechos, libertades y derechos de los ciudadanos en el marco del Estado de Derecho".
"Las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional somos instituciones obedientes y no beligerantes y cumplimos nuestra misión con estricta sujeción al poder civil y a la Constitución. Al mismo tiempo, debo señalar, estamos seguros que el país no aceptará ningún intento de alterar el orden constitucional a través de la violencia para atentar contra la democracia", señaló Proaño.
En ese sentido, dijo que el comando que lidera respalda tanto la decisión del Congreso de enjuiciar políticamente a Lasso, como a la decisión del presidente de disolver la Asamblea Nacional, bajo el amparo de la ley.
El alto mando militar hizo un llamado a la unidad de los ecuatorianos y dijo que la fuerza del orden actuará si fuera necesario. "Hacemos un llamado a los ecuatorianos para mantener un clima de respeto a la ley, sin enfrentamiento ni violencia" para mantener un país en paz y dignidad.
Your browser doesn’t support HTML5
El juicio político
Destituir a Lasso habría requerido de 92 votos de la Legislatura de 137 miembros.
La Constitución del país establece la llamada "muerte cruzada", que permite a un mandatario convocar elecciones tanto para su puesto como para la Asamblea Nacional bajo ciertas circunstancias, entre ellas cuando las acciones de la Legislatura bloquean el funcionamiento del gobierno.
Lasso ahora permanecerá en el cargo, gobernando por decreto, mientras las autoridades electorales nacionales fijan la fecha de los comicios.
El tribunal electoral de Ecuador debe decidir la fecha de las nuevas elecciones dentro de los siete días posteriores a la disolución de la Asamblea Nacional.
Lasso niega las acusaciones de que se hizo la vista gorda ante la supuesta malversación de fondos relacionada con un contrato en la empresa estatal de transporte de petróleo Flopec, argumentando que su administración hizo cambios rentables al acuerdo, que se firmó años antes de que él asumiera el cargo.
También lea EEUU asegura relación con Ecuador “sigue siendo fuerte” pese a disolución de Asamblea NacionalCon la decisión de disolver la Asamblea Nacional, el presidente ecuatoriano pone fin al juicio político y podrá gobernar hasta por seis meses por decreto con el control de la Corte Constitucional.
En una cadena de radio y televisión Lasso aseguró que “todos los esfuerzos del Poder Legislativo están enfocados en desestabilizar al gobierno”.
Lasso deberá ahora convocar a elecciones presidenciales y legislativas. Los ganadores de estos comicios completarán el actual período presidencial y legislativo que termina en mayo de 2025.
El presidente argumentó que la disolución de la Asamblea “es una decisión democrática no sólo porque es constitucional sino porque le devuelve al pueblo ecuatoriano el poder de decidir su futuro en las próximas elecciones”.
“Esta es la mejor decisión posible, que nos abre el camino para recuperar la esperanza, la tranquilidad”, añadió, y dijo que “este es un nuevo momento para el optimismo”.
La maquinaria electoral, en marcha
El miércoles, en la tarde, Diana Atamaint, presidenta del Consejo Nacional Electoral de Ecuador, confirmó que el presidente Guillermo Lasso no tiene, hasta el momento, ningún impedimento para ser candidato en las próximas elecciones.
Durante una rueda de prensa, en la que explicó las condiciones de la próxima contienda electoral, Atamaint señaló que la Función Electoral debe convocar a elecciones anticipadas, en un plazo de siete días y realizar el proceso dentro de un plazo de 90 que, aclaró, no incluye una eventual segunda vuelta.
En las “próximas horas tendremos ya un calendario electoral, tal como establece la ley, coordinado con el Tribunal Contencioso Electoral, que tendrá que ser aprobado por el pleno Consejo Nacional electoral”, aseguró la funcionaria.
También lea Ecuador: Presidente Lasso se defiende en la Asamblea durante juicio políticoTambién informó que las áreas técnicas se encuentran trabajando para desarrollar un plan “operativo matriz de riesgos y contingencias, directrices y presupuesto” para las elecciones presidenciales y legislativas 2023, y señaló que, quienes resulten electos, ejercerán sus funciones hasta el 23 de mayo de 2025.
Al tratarse de un proceso electoral “inédito”, Atamaint dijo a la prensa que el área jurídica trabajará en la elaboración de un reglamento específico para este proceso “extraordinario”, con el propósito de cumplir lo que señala la ley.
Aunque la presidenta del organismo electoral ecuatoriano afirmó que aún no se tiene un presupuesto ni el costo que podría generar este proceso, afirmó que “la función electoral está consciente de que, en este momento, al país le conviene o debemos acudir a recursos del Estado y generar austeridad", pero enfatizó en que no pueden “poner el riesgo la calidad de los procesos electorales”.
Respaldo militar
La decisión de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional de mantener "inalterable su posición de absoluto respeto a la Constitución y las leyes", dijo el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador", como aseguró Proaño, podría por el momento mantener la estabilidad en el país.
El alto mando aseguró en su declaración que la decisión de Lasso de disolver la Asamblea estaba consagrada en la Constitución.
Reacciones
Tras conocerse la decisión de Lasso, el Departamento de Estado de Estados Unidos se apresuró a refirmar que las relaciones entre ambos países no han sido afectadas por lo ocurrido.
“Nuestra relación bilateral con el gobierno de Ecuador y el pueblo ecuatoriano sigue siendo fuerte”, dijo Vedant Patel, portavoz adjunto de Estado, durante una conferencia de prensa. El gobierno estadounidense aseguró “respetar la voluntad de los ciudadanos y el gobierno”.
Por su parte, el presidente de México, Manuel Andrés López Obrador, dijo el miércoles que espera que los ecuatorianos puedan resolver la situación interna que atraviesa el país con la convocatoria de elecciones anticipadas.
"No creo yo que haya inestabilidad y, además, no lo deseo. Ojalá y los hermanos ecuatorianos puedan resolver esto así, con este procedimiento. Si se va a convocar a nuevas elecciones que participen todas las fuerzas políticas. Y no creo que haya violencia política", afirmó López Obrador a periodistas.
"En el caso, vamos a estar pendientes, de que se den enfrentamientos, nuestra embajadora ya seguramente está atendiendo a nuestros paisanos en Ecuador", agregó.
En un breve comunicado de un párrafo, la cancillería de Perú dijo que respalda el proceso democrático en Ecuador y “hace votos para que las elecciones generales, que resultarán de la decisión que ha adoptado el presidente Guillermo Lasso en ejercicio de sus facultades constitucionales, permitan al pueblo ecuatoriano asegurar el mantenimiento de la gobernabilidad política y la paz social”.
El expresidente Rafael Correa, que vive fuera del país, criticó la situación actual en su cuenta de Twitter: "Los grandes «demócratas» quitan la seguridad del presidente y autoridades de Asamblea Nacional. Se les caen todas las máscaras".
Algunos legisladores han dicho que cualquier disolución de la Asamblea sería inconstitucional y que se negarían a cumplirla.
La organización indígena más grande de Ecuador, CONAIE, dijo en Twitter que la decisión de Lasso constituía una "dictadura" y agregó que celebraría un "consejo ampliado extraordinario" para analizar la situación.
El año pasado, la CONAIE encabezó protestas en todo el Ecuador que casi derrocan a Lasso.
Los elegidos para el poder en las elecciones anticipadas solo servirían hasta que se lleven a cabo los comicios regulares en 2025.
Los legisladores del partido del expresidente Rafael Correa, él mismo condenado por corrupción, encabezaron la acusación de juicio político y prometieron sus 47 votos a favor de la destitución.
El proceso de juicio político fue el primero contra un presidente ecuatoriano en décadas.
[Con la colaboración de Karen Sánchez, de la VOA, desde Bogotá, e información de AP y Reuters]
Your browser doesn’t support HTML5
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestro canal de YouTube y activa las notificaciones, o bien, síguenos en las redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.