Pinturas tóxicas, químicos de riesgoso uso para la salud usados durante la fabricación de juguetes, y el mismo tamaño de los mismos siguen siendo un riesgo alarmante para la salud de los niños.
Así lo reveló el más reciente estudio del Grupo de Investigación Ambiental de Estados Unidos.
"Compramos juguetes a productores nacionales y los enviamos a laboratorios especializados”, dijo Elizabeth Hitchcock, del Grupo de Investigaciones de Interés Público con sede en EE.UU. “Ellos encontraron que contenían plomo y antimonio en el revestimiento exterior, que son sustancias cancerígenas reguladas".
El laboratorio también encontró un grupo de químicos usados para hacer más suave el plástico que han sido relacionados con efectos adversos para la salud, especialmente de los niños:
"Esta muñeca contiene dos de los seis tipos de esas sustancias. Y sabemos que los niños menores de 3 años se llevan todo a la boca", dijo Elizabeth Hitchcock.
La institución señala que el gobierno ha ordenado la salida del mercado de más de 12 millones de productos, pero eso no es suficiente. El propio Estado reconoce que comparte la preocupación pero no tiene capacidad suficiente para combatir el riesgo:
"Tenemos autoridad sobre químicos riesgosos pero carecemos de recursos para hacer investigaciones independientes sobre la toxicidad química", dijo Robert Adler, de la Comisión de Productos seguros para el consumo.
Y aunque la Asociación de Industria del Juguete asegura que no hay nada de qué preocuparse, "los consumidores necesitan saber que los juguetes en sus habitaciones son más seguros que nunca", señaló Stacy Leistner, de la Asociación de Industria del Juguete.
También admitió que ellos no analizan todos los juguetes y dejan esa tarea al gobierno.