Tan pronto el candidato republicano Donald Trump anunció que invertiría en avisos publicitarios en estados típicamente demócratas, la campaña de Hillary Clinton salió al frente para defender su territorio.
La campaña de Trump dijo que gastaría $25 millones de dólares en avisos publicitarios en Michigan, Nuevo México y 11 estados más durante los últimos días de la campaña para tratar de ganar votos en estados mayoritariamente demócratas.
En respuesta, la campaña de Hillary Clinton manifestó que invertiría más de $100 mil dólares en comerciales de televisión en Michigan y Nuevo México. También informó que reforzarían la publicidad por primera vez desde julio en Colorado, y en Virginia.
El portavoz de la campaña de Clinton declaró que la campaña del rival republicano ve un camino abierto en estos estados, pero “nosotros nos vamos a asegurar que aquellas puertas permanezcan cerradas”.
Donald Trump tiene que ganar alguno de los estados tradicionalmente demócratas para asegurarse los 270 votos electorales que necesita para ser elegido presidente.