La primera ministra británica, Theresa May, dijo a través de un comunicado en la mañana del lunes que tras el Brexit los ciudadanos europeos tendrán que solicitar un documento especial de residencia para demostrar que tienen permiso de trabajo y puedan ser atendidos en centros de salud de su país.
"Tendrán que solicitar a la secretaría del Interior un permiso para quedarse" argumentó May.
La primer ministra británica indicó también que los europeos que hayan obtenido el estatus de ‘asentados’ podrán seguir pidiendo la reunificación familiar, refiriéndose a que quienes demuestren tener los permisos al día "podrán traer a miembros de su familia en los mismos términos que los ciudadanos británicos" y precisó: “No habrán rupturas familiares".
Asimismo May explicó que esperaba llegar a un acuerdo con Bruselas para fijar un acuerdo sobre los ciudadanos que puedan acceder al estatus de ‘asentado’ manifestando que la fecha límite para esta decisión será en marzo de 2019.
En el documento publicado el lunes por el gobierno se explica que tras la salida de Reino Unido de la Unión Europea, se terminará la libertad de tránsito, pero manifiesta que "la inmigración entre el Reino Unido y la Unión Europea continuará existiendo".