Emergencia ambiental por derrame tóxico

Río las Ánimas, en Colorado.

La Nación Navajo, que cubre partes de Nuevo México, Utah y Arizona, también declaró una emergencia y prohibieron la desviación de sus aguas a sus sistemas de agua potable e irrigación.

Los estados de Colorado y Nuevo México han declarado partes de los ríos Ánimas y San Juan como áreas de desastre tras el derrame tóxico provocado accidentalmente por trabajadores de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos la semana pasada.

Los ríos fueron contaminados con aguas tóxicas de color amarillo que contienen altas concentraciones de arsénico, plomo y otros metales pesados, provenientes de una mina de oro abandonada en Silverton, Colorado.

La Nación Navajo, que cubre partes de Nuevo México, Utah y Arizona, también declaró una emergencia y prohibió la desviación de sus aguas a sus sistemas de agua potable e irrigación.

La Agencia Ambiental ha dicho que los contaminantes no representan un peligro inmediato para la salud y aseguran que el agua de los ríos diluirá los metales pesados antes de que sean un peligro a largo plazo.

Ron Cohen, un experto ambiental y profesor de la Escuela de Minas de Colorado dijo que el alarmante color amarillo mostaza es lo que los mineros llaman “yellow boy”, y que “estéticamente luce peor de lo que en realidad es”.

Cohen afirma que lo mejor que puede hacer la EPA es dejar que los metales se asienten en el fondo y esperar a que las corrientes de nieve derretida de las montañas ayuden a diluir los contaminantes en la primavera.

Hasta ahora no se han detectado efectos en la vida silvestre del sistema fluvial afectado.

No obstante, secciones de los ríos permanecerán cerrados hasta por lo menos el 17 de agosto.