La embajada de Rusia en Estados Unidos calificó el jueves de "draconianas" las nuevas sanciones estadounidenses y dijo que la razón de las nuevas restricciones -las acusaciones de que envenenó a un exespía y su hija en Reino Unido- era descabellada.
El portavoz de Vladimir Putin, Dmitry Peskov, expresó que el anuncio estadounidense va en contra de una atmósfera “constructiva” como la establecida el pasado mes durante la cumbre Trump-Putin y negó rotundamente cualquier rol ruso en el caso de envenenamiento en Gran Bretaña.
“A nuestro punto de vista, estas restricciones apresuradas son absolutamente ilegales y no forman parte de la ley internacional”, indicó Peskov.
Las sanciones se aplican a pesar de los esfuerzos del presidente Donald Trump por mejorar las relaciones con Rusia y su líder, Vladimir Putin, así como sus duras críticas a la investigación sobre la interferencia rusa en las elecciones de 2016.
El departamento de Estado dijo el miércoles que Estados Unidos tomó la determinación esta semana de que Rusia había usado el agente nervioso Novichok para envenenar a Sergei Skripal y su hija, Yulia, y que seguirían las sanciones. Además señaló que el Congreso está siendo notificado de la determinación y que las sanciones entrarán en vigencia alrededor del 22 de agosto, cuando se publique oficialmente en el Registro Federal.
Esas sanciones incluirán la supuesta denegación de licencias de exportación para que Rusia compre una amplia variedad de artículos relacionados con seguridad nacional, según un alto funcionario del departamento de Estado que informó a los reporteros bajo condición de anonimato, ya que no estaba autorizado para hacerlo.
Por su parte, la embajada estadounidense manifestó que seguiría pidiendo una investigación abierta y transparente sobre el incidente.