McDonald's enfrenta una demanda por parte de Rusia que podría prevenir a la cadena de comida rápida de servir algunos de sus productos en el país por ser demasiado calóricos.
La agencia de protección del consumidor de Rusia, Rospotrebnadzor, dijo el 25 de julio que va a llevar a la empresa ante tribunales por vender alimentos que contienen más grasas e hidratos de carbono que los permitidos por la normativa nacional.
McDonald's todavía no ha respondido a las acusaciones.
La denuncia se produjo en medio de una gran tensión entre Rusia y EE.UU. por la crisis en Ucrania.
EE.UU. ha impuesto fuertes sanciones a Rusia por anexionarse Crimea, que era territorio de Ucrania hasta marzo de este año, y por apoyar a los rebeldes separatistas que luchan en el este de Ucrania.
La última acusación por parte de EE.UU. a Rusia es de disparar artillería a bases militares ucranianas desde territorio ruso.
La agencia de protección del consumidor Rospotrebnadzor tiene un historial de actuar según la agenda política de Rusia, aunque de momento no se han encontrado conexiones demostrables de que haya atacado a la multinacional norteamericana debido a tensiones geopolíticas.
Sin embargo, cuando las tensiones entre Rusia y Georgia se intensificaron antes de la guerra de 2008, la agencia prohibió la importación de vino y agua mineral de Georgia, que son dos de sus principales productos de exportación, por no cumplir con las normas sanitarias rusas.
El año pasado, cuando Ucrania iba a firmar un acuerdo comercial con la Unión Europea, la agencia hizo que Rusia prohibiera las importaciones de chocolates hechas por la compañía de Petro Poroshenko, quien es el actual presidente de Ucrania.