El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergey Lavrov, dijo este martes que Snowden no ha cruzado la frontera rusa y reaccionó aireadamente a las advertencias estadounidenses sobre posibles consecuencias si no es repatriado.
La guerra de declaraciones en torno al prófugo Edward Snowden continuó este martes con el anuncio del presidente ruso Vladimir Putin de que Rusia no entregará al excontratista de la NSA requerido por espionaje.
Putin confirmó que Snowden se encuentra en la zona de tránsito del aeropuerto internacional Sheremetyevo de Moscú, tal como lo había dicho antes su ministro de Relaciones Exteriores, Sergey Lavrov.
Al hablar durante una visita a Finlandia, el mandatario ruso agregó que las agencias de seguridad de su país "no trabajaron y no están trabajando" con Snowden. No dio más detalles.
Putin expresó su confianza de que la presencia de Snowden en territorio ruso no afecte las relaciones con Estados Unidos. "Mientras más pronto decida él su destino final, mejor para nosotros", agregó el mantadario.
El secretario de Estado John Kerry reiteró el pedido a Rusia de entregar a Snowden, aunque pidió "tranquilidad" y aseguró que Washington no busca el “enfrentamiento”.
"Me gustaría apelar a la tranquilidad y a la razón en un momento en el que no debemos elevar el nivel de enfrentamiento" dijo el secretario de Estado desde Arabia Saudita, donde se encuentra de gira.
El gobierno de Rusia había rechazado más temprano que esté ayudando a Snowden, asegurando que sus autoridades no tienen derecho legal para devolver al fugitivo a Estados Unidos.
El ministro Lavrov afirmó que Snowden no ha cruzado la frontera rusa y reaccionó aireadamente a las advertencias estadounidenses sobre posibles consecuencias si no entregan a Snowden.
“Consideramos que los intentos de acusar a Rusia de violar leyes estadounidenses y de algún tipo de conspiración, que para colmo son acompañados de amenazas, son absolutamente sin fundamento e inaceptables” dijo el diplomático.
Kerry también contestó a ese señalamiento. "No buscamos un enfrentamiento”, dijo. “No estamos dando órdenes a nadie. Simplemente pedimos algo" bajo el imperio de la ley, añadió.
Estados Unidos y Rusia no tienen tratado de extradición, pero la Casa Blanca y el secretario de Kerry, han presionado públicamente al Kremlin para que devuelva a Snowden.
“Creemos que es muy importante en términos de nuestra relación”, dijo Kerry el lunes. “Pensamos que es muy importante en términos de respeto al estado de derecho”.
Lavrov insistió en que el fugitivo no ha entrado oficialmente a territorio ruso pues se mantiene en la zona de tránsito dentro del aeropuerto de Moscú, probablemente acompañado de diplomáticos extranjeros, a donde no pueden acceder las autoridades.
“Él escogió por sí solo la ruta, de la cual nos enteramos por la prensa, y no cruzó la frontera rusa”, afirmó Lavrov.
Snowden, de 30 años, ha pedido asilo a Ecuador y hacia allá se dirigía cuando abandonó Hong Kong el domingo y estuvo a punto de abordar el lunes un avión de Aeroflot hacia La Habana, que finalmente partió sin él.
Snowden, de 30 años, ha pedido asilo a Ecuador y hacia allá se dirigía cuando abandonó Hong Kong el domingo y estuvo a punto de abordar el lunes un avión de Aeroflot hacia La Habana, que finalmente partió sin él.
Putin confirmó que Snowden se encuentra en la zona de tránsito del aeropuerto internacional Sheremetyevo de Moscú, tal como lo había dicho antes su ministro de Relaciones Exteriores, Sergey Lavrov.
Al hablar durante una visita a Finlandia, el mandatario ruso agregó que las agencias de seguridad de su país "no trabajaron y no están trabajando" con Snowden. No dio más detalles.
Putin expresó su confianza de que la presencia de Snowden en territorio ruso no afecte las relaciones con Estados Unidos. "Mientras más pronto decida él su destino final, mejor para nosotros", agregó el mantadario.
El secretario de Estado John Kerry reiteró el pedido a Rusia de entregar a Snowden, aunque pidió "tranquilidad" y aseguró que Washington no busca el “enfrentamiento”.
"Me gustaría apelar a la tranquilidad y a la razón en un momento en el que no debemos elevar el nivel de enfrentamiento" dijo el secretario de Estado desde Arabia Saudita, donde se encuentra de gira.
El gobierno de Rusia había rechazado más temprano que esté ayudando a Snowden, asegurando que sus autoridades no tienen derecho legal para devolver al fugitivo a Estados Unidos.
El ministro Lavrov afirmó que Snowden no ha cruzado la frontera rusa y reaccionó aireadamente a las advertencias estadounidenses sobre posibles consecuencias si no entregan a Snowden.
“Consideramos que los intentos de acusar a Rusia de violar leyes estadounidenses y de algún tipo de conspiración, que para colmo son acompañados de amenazas, son absolutamente sin fundamento e inaceptables” dijo el diplomático.
Kerry también contestó a ese señalamiento. "No buscamos un enfrentamiento”, dijo. “No estamos dando órdenes a nadie. Simplemente pedimos algo" bajo el imperio de la ley, añadió.
Estados Unidos y Rusia no tienen tratado de extradición, pero la Casa Blanca y el secretario de Kerry, han presionado públicamente al Kremlin para que devuelva a Snowden.
“Creemos que es muy importante en términos de nuestra relación”, dijo Kerry el lunes. “Pensamos que es muy importante en términos de respeto al estado de derecho”.
Lavrov insistió en que el fugitivo no ha entrado oficialmente a territorio ruso pues se mantiene en la zona de tránsito dentro del aeropuerto de Moscú, probablemente acompañado de diplomáticos extranjeros, a donde no pueden acceder las autoridades.
“Él escogió por sí solo la ruta, de la cual nos enteramos por la prensa, y no cruzó la frontera rusa”, afirmó Lavrov.
Snowden, de 30 años, ha pedido asilo a Ecuador y hacia allá se dirigía cuando abandonó Hong Kong el domingo y estuvo a punto de abordar el lunes un avión de Aeroflot hacia La Habana, que finalmente partió sin él.
Snowden, de 30 años, ha pedido asilo a Ecuador y hacia allá se dirigía cuando abandonó Hong Kong el domingo y estuvo a punto de abordar el lunes un avión de Aeroflot hacia La Habana, que finalmente partió sin él.