El uso de cigarrillos y derivados del tabaco entre los jóvenes de Estados Unidos declinó en 2016 al menor nivel en seis años, informaron los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), dados a conocer el jueves.
Datos de la Encuesta Nacional 2016 sobre el Consumo de Tabaco entre Jóvenes, muestran que la declinación se debe a una reducción en el uso de cigarrillos electrónicos.
El número de estudiantes de escuela media y secundaria que usaron productos de tabaco cayó de 4,7 millones en 2015 a 3,9 millones en 2016. El uso de cigarrillos electrónicos en el mismo grupo bajó de 3 millones en 2015 a 2,2 millones.
El uso de cigarrillos tradicionales entre ese grupo de jóvenes disminuyó de 1,6 millones a 1,4 millones.
Las cifras reveladas por los CDC muestran también una reducción de 16 por ciento en el uso de cigarrillos electrónicos entre estudiantes de secundaria en 2016 (11,3 por ciento), comparado con 2015.
Cerca de un 8 por ciento de estudiantes de secundaria usaron cigarrillos tradicionales, de 9,3 por ciento en 2015.
Entre los estudiantes de escuela media, 4,3 por ciento usaron cigarrillos electrónicos el año pasado, frente a 5,3 por ciento en 2015.
Hubo poco cambio en la tasa de consumo de cigarrillos tradicionales entre los jóvenes de escuela media. Esa tasa fue de 2,2 por ciento en 2016 y 2,3 por ciento en 2015.
Las cifras representan la primera vez que el uso de todo tipo de derivados del tabaco ha declinado entre los jóvenes estadounidenses desde que los CDC comenzaron a reportar el consumo en 2011.
Los datos muestran también que de los estudiantes que usaron cualquier tipo de producto derivado del tabaco, casi la mitad usó dos o más.
El comisionado de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA por sus siglas en inglés), Scott Gotlieb dijo que aunque las cifras son alentadoras es "crítico asegurar que esta tendencia a la baja continúe a largo plazo".
En un comunicado, Gotlieb dijo que también es claro que "los jóvenes continúan experimentando con una amplia gama de productos de tabaco o convirtiéndose en usuarios regulares", por lo que la FDA ha invertido fuertemente en campañas científicas convincentes para educar a los jóvenes sobre los peligros del uso del cigarrillo.
El gobierno estadounidense también tiene una fuerte campaña dirigida a los vendedores de tabaco y derivados para que entiendan su responsabilidad y eviten que esos peligrosos y adictivos productos caigan en manos de los niños.
El FDA ha enviado más de 4.000 cartas de advertencia a proveedores en tiendas y comercios online por vender tabaco y derivados a menores en violación a restricciones impuestas en agosto de 2016. El Comisionado Gotlieb dijo que la agencia planea incrementar sus esfuerzos para reducir las enfermedades y muertes producidas por el tabaco.