Expertos revelan plan para acabar con la rabia

Un grupo de perros a punto de ser vacunados contra la rabia en Tanzania.

La vacunación masiva de los perros en los países más pobres acabaría con el 98 por ciento de los casos.

Un plan para eliminar la rabia causada por las mordidas de perros, que mata a decenas de miles en todo el mundo, ha sido propuesto por científicos de varios países.

La enfermedad viral —transmitida a través de la saliva de un animal infectado— es poco común en los países desarrollados donde las mascotas se vacunan rutinariamente, pero no es el caso en las partes rurales de África, Asia y aún los países más pobres de América Latina.

En esta última región, los programas masivos de vacunación de perros han logrado con éxito el control de la rabia y ahora los científicos piensan que ese esfuerzo se pude emular en todo el mundo.

Guy Palmer, director de la Escuela para la Salud Animal de la Universidad estatal de Washington piensa que con la vacunación de los perros se eliminaría el 98 por ciento de la rabia en el mundo.

“Es una plaga antigua”, dice Palmer. “Las descripciones de sufrimiento humano y muerte pueden verse desde los primeros tiempos de la historia. Aun hoy, la rabia es la enfermedad infecciosa con mayor mortalidad en los humanos”, añade.

Felix Lankester, director de la Iniciativa de Salud Serengeti que conduce campañas de vacunación en los pueblos rurales alrededor del parque nacional Serengeti en Tanzania, piensa que un esfuerzo global de vacunación costaría cientos, o quizá miles, de millones de dólares.

Se necesitaría el involucramiento de agencias de salud, organizaciones caritativas, gobiernos y otros para hacer frente a tal esfuerzo.

Pero Lancaster está convencido de que puede hacerse. “Sabemos cómo y tenemos las armas para hacerlo. Que se puedan conseguir la voluntad política y los fondos, eso es otra cosa”, dijo.

La rabia sigue siendo una amenaza para la mitad de la población mundial y un 40% de víctimas son niños.

Su período de incubación es de 3 meses y de no tratarse, el virus se riega por todo el sistema nervioso, inflamando fatalmente el cerebro y la espina dorsal.