Se fortalece el consumo en EE.UU.

Los productos electrónicos estuvieron al tope de la lista de los gastos de los consumidores estadounidenses.

Otros sectores de gran crecimiento fueron la joyería y las ventas por internet.

A la vez que un informe privado elaborado por el Instituto de Gerencia y Abastecimiento mostró que la actividad del sector en Estados Unidos subió en diciembre más de lo esperado y a su mayor ritmo en más de cuatro años, el consumo y las ventas de auto también se mostraron sólidos al final del 2010.

De esta forma, la economía de Estados Unidos, parece ir reuniendo indicador que apunta a una consistente recuperación.

Durante las fiestas de fin de año de 2010, los estadounidenses gastaron más en ropa, zapatos, bienes de lujo y productos electrónicos de lo que lo habían hecho en 2009. De esta forma las ventas minoristas mantuvieron el ritmo alcista que iniciaron en agosto 2010.

Las cifras difundidas por MasterCard Advisors' SpendingPulse, que supervisa todo tipo de gastos, entre ellos los efectuados al contado, indican que los consumidores compraron especialmente ropa y zapatos en la temporada navideña.

Otro sector de gran repunte fue el de la joyería y las ventas por internet. Incluso el sector de muebles y decoraciones para el hogar experimentó un modesto repunte.

En términos generales " las ventas navideñas fueron robustas", opinó Michael McNamara, vicepresidente de investigación y análisis de SpendingPulse. "Esta es la mayor mejoría sostenida desde la recesión".

Suben las ventas de autos por primera vez

También las ventas de automóviles subieron en Estados Unidos en 2010, por primera vez desde la recesión.

Jessica Caldwell, directora de precios y análisis del sitio Web Edmunds.com, especializado en el consumo dijo que "la recuperación será lenta y gradual, en vez de un repunte rápido".

Durante el año, las ventas de automóviles y camiones nuevos totalizó 11,6 millones de unidades, un incremento de 11% respecto del año anterior, informaron las compañías automotrices.

Sin embargo, los fabricantes se muestran preocupados por el alza del precio de los combustibles y el efecto que puede tener sobre el uso y la venta de automóviles. General Motors, Ford y Toyota predicen que en 2011 las ventas llegarán a entre 12,5 y 13 millones de unidades para el 2011.

Pero, aún deberán pasar años para regresar a los 17 millones de vehículos, el máximo histórico, que se registró a mediados de la década de los ‘90.