Servicio postal aprieta cinturón

El Servicio Postal evalúa reducir en un 30% su fuerza laboral para hacer frente a pérdidas que ascendieron a $8.000 millones de dólares en 2010.

Con la desaceleración económica y el aumento del uso del correo electrónico y los teléfonos celulares, el Servicio Postal de Estados Unidos considera tomar algunas medidas drásticas para hacer frente a sus multimillonarias pérdidas.

Borradores de propuestas obtenidos por los medios de prensa estadounidenses el jueves y viernes muestran que el Servicio Postal quiere terminar algunos de sus contratos actuales con los sindicatos y eliminar cerca del 30% de su fuerza laboral en los próximos cuatro años.

Lo que se propone es que el Servicio Postal elimine a 220.000 de sus 560.000 puestos de trabajo a tiempo completo. Se dice que alrededor de 100.000 puestos de trabajo podrían ser reducidos a través de jubilaciones anticipadas o bajas voluntarias. El resto provendría de los despidos.

Otra propuesta pide que el Servicio Postal se retire de los planes de retiro y de salud del gobierno de Estados Unidos y establezca sus propios planes para reducir aún más los costos.

Si bien el Servicio Postal es una agencia gubernamental de Estados Unidos, está configurado para funcionar como una empresa privada, sin financiación del gobierno. Sus ingresos provienen de la venta de sellos y de los servicios postales.

A pesar de ya haber eliminado 110.000 puestos de trabajo en los últimos años, el Servicio Postal perdió $8.000 millones de dólares el año pasado y se espera que pierda otros $8.000 millones más este año.

Funcionarios del Servicio Postal han hecho varias sugerencias sobre otras maneras de reducir costos, incluyendo la eliminación de la entrega de correo los sábados.