¿Están los hispanos listos para la circuncisión masculina?

Christopher Keyhaw dice que el procedimiento es "una tortura" y "una violación a los derechos humanos".

Uno de los temas de la XIX Conferencia Internacional del VIH en Washington es la circuncisión masculina como parte de las estrategias preventivas contra el VIH.
La Organización Mundial de la Salud, OMS, y las Naciones Unidas, a través de UNAIDS, están promoviendo la circuncisión masculina voluntaria como método preventivo contra el VIH. El método ofrece una solución a bajo costo, comparado con los costos de tratamiento de personas infectadas, y según los organismos internacionales reduce en un 60% el riesgo de que el hombre se contagie con el VIH.

Pero los grupos y organismos que intentan conseguir fondos para promover esta estrategia en la conferencia encontrarán oposición de diferentes grupos.

“Todo el mundo nace con genitales y tiene derecho a mantenerlos. Todos tienen derecho a tener su cuerpo completo”, dice Christopher Keyhaw, de la Organización Nacional de Centros de Información sobre la Circuncisión, quien sostiene una pancarta que dice “circuncisión es tortura” a las afueras del centro de convenciones de la capital.

La discusión sobre la circuncisión masculina data de siglos y ha estado relacionada a prácticas religiosas judías y musulmanes en todas partes del mundo. Pero algunos grupos en Estados Unidos, como el que Keyhaw representa, consideran que cuando se práctica “a los niños, es una violación de sus derechos humanos”.

La circuncisión masculina

¿Cómo se realiza la circuncisión masculina?

El procedimiento toma muy poco tiempo. Una inyección en la base del pene lo duerme para que no se sienta dolor cuando la piel se corta. La herida se cose, se limpia y se cubre con gaza.

¿Qué pasa después de la operación?

  • El hombre descansa por un rato y luego va a casa.
  • Después de tres días se remueven las gazas. No se pueden tener relaciones sexuales por las siguientes seis semanas.
  • Durante los siguientes siete días es muy importante mantener el área limpia y evitar el ejercicio intenso.
  • Si la persona experimenta complicaciones después de la cirugía, como dolor prolongado o sangrado, deben visitar el centro médico.


Fuente: USAID

No ofrece un 100% de protección

El otro aspecto que es importante mencionar es que la circuncisión, por sí sola, no protege un completamente contra el virus del VIH. Aún aquellos hombres que han pasado por la operación deben protegerse con el condón.

El método preventivo puede tener más sentido en naciones del sur y este de Africa, donde los niveles de propagación del virus son muy altos. En esta región se requerirían más de 20 millones de circuncisiones para el año 2025, proyectan estudios de Instituto de Salud de EE.UU. Esta cantidad preocupa, en especial cuando se compara con el número de doctores y servicios de salud disponibles en estos países.

Por esa razón parte de los esfuerzos en esta área de prevención están enfocados al entrenamiento de asistentes de salud y enfermeras, que según los críticos de este tratamiento preventivo aumenta los riesgos de problemas durante el procedimiento.

“La operación en sí ya trae sus riesgos”, dijo a la Voz de América, Patricia Canessa de la organización Salud Latina, con sede en Chicago, quien considera que hace falta realizar más estudios sobre el tema en Estados Unidos.

Política pública en EE.UU.

Tal como se oficializó la prueba del VIH para mujeres embarazadas en Estados Unidos, hay quienes han sugerido que la circuncisión masculina pase a ser mandatoria para los bebés, tan pronto nacen, o incluso para personas en grupos de alto riesgo.

“Esta idea no sería muy bien recibida entre la comunidad hispana”, dice Oscar Mairena, especialista en políticas públicas y leyes de la organización NASTAD, agregando que la conversación sobre el genital masculino es todavía taboo entre los hispanos y “está relacionada a su identidad y rol dentro de su estructura familiar y social”, concluyendo que la “circuncisión en general no se ve con buenos ojos”.

Miriam Vega, vice presidente de la organización Latino Commission on AIDS, también indicó que hacen falta más estudios específicos entre los hispanos y agrega que el proceso de prevención aún necesita enfocarse en educar sobre las bases, “cómo se produce el contagió es una pregunta todavía sin responder entre muchas personas de habla hispana en EE.UU.”.

Las conclusiones de la OMS se basan en un análisis de 10 estudios realizados en Sudáfrica, Kenia, Comoros, Nigeria, Zambia y Uganda, en los que se incluyeron más de 25.000 circuncisiones hechas por asistentes clínicos, que demostró que los riesgos del procedimiento son bajos. Según este análisis, la circuncisión masculina podría prevenir seis millones de nuevas infecciones y cerca de tres millones de muertes en los próximos 20 años.