Los miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, llegaron a un acuerdo para permitir al presidente Barck Obama un ataque en Siria, aunque con limitaciones, pero ahora el senador McCain se opone a la misma.
El senador republicano John McCain dice no apoyar la resolución aprobada la noche del martes por la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado, que autoriza el uso de la fuerza militar de Estados Unidos contra el gobierno de Siria.
La resolución permitiría hasta 60 días de acción militar contra el gobierno del presidente sirio Bashar Al Assad, pero prohibiría el uso de soldados sobre tierra para operaciones de combate.
McCain, un franco defensor de la intervención en contra del régimen de Bashar al-Assad, que quisiera algo más que un ataque con misiles, dijo que “en su forma actual”, no apoya la resolución.
El senador demócrata Bob Menéndez, presidente de la comisión, y el senador republicano Bob Corker habían trabajado cuidadosamente el lenguaje de la resolución que finalmente fue aprobada.
Menéndez que antes se opuso invasiones a otras naciones en ocasiones previas, esta vez apoya al presidente Barack Obama en su decisión de atacar Siria.
Menéndez aseguró que no se debe “ignorar los horribles actos del régimen sirio”, por lo que es necesario actuar inmediatamente e invitó al resto de congresistas para voten a favor de esta acción militar.
“Vamos a enviar un mensaje que haga constar que Estados Unidos no permitirá el uso de armas químicas en ninguna parte del mundo (…) Pero, ¿qué mensaje enviamos si no actuamos sobre quienes las utiliza?”, se preguntó Menéndez.
Los senadores también pidieron al secretario de Estado John Kerry, y al secretario del Departamento de Defensa, Chuck Hagel, una explicación detallada de las acciones que se podrían tomar y de las pruebas que justifican una acción militar en Siria.
“El mundo está observando. Observan cuáles serán las acciones que vamos a tomar como nación”, dijo Kerry, y agregó que “si no tienen nada que esconder, entonces dejen que nuestros inspectores entren ahora mismo sin ningún tipo de restricción y verifiquen. Pero no lo hicieron”, recordó Kerry.
La medida también permitiría al presidente extender las operaciones militares por 30 días más a la espera de una ratificación de parte del Congreso.
La resolución permitiría hasta 60 días de acción militar contra el gobierno del presidente sirio Bashar Al Assad, pero prohibiría el uso de soldados sobre tierra para operaciones de combate.
McCain, un franco defensor de la intervención en contra del régimen de Bashar al-Assad, que quisiera algo más que un ataque con misiles, dijo que “en su forma actual”, no apoya la resolución.
El senador demócrata Bob Menéndez, presidente de la comisión, y el senador republicano Bob Corker habían trabajado cuidadosamente el lenguaje de la resolución que finalmente fue aprobada.
Menéndez que antes se opuso invasiones a otras naciones en ocasiones previas, esta vez apoya al presidente Barack Obama en su decisión de atacar Siria.
Menéndez aseguró que no se debe “ignorar los horribles actos del régimen sirio”, por lo que es necesario actuar inmediatamente e invitó al resto de congresistas para voten a favor de esta acción militar.
“Vamos a enviar un mensaje que haga constar que Estados Unidos no permitirá el uso de armas químicas en ninguna parte del mundo (…) Pero, ¿qué mensaje enviamos si no actuamos sobre quienes las utiliza?”, se preguntó Menéndez.
Los senadores también pidieron al secretario de Estado John Kerry, y al secretario del Departamento de Defensa, Chuck Hagel, una explicación detallada de las acciones que se podrían tomar y de las pruebas que justifican una acción militar en Siria.
“El mundo está observando. Observan cuáles serán las acciones que vamos a tomar como nación”, dijo Kerry, y agregó que “si no tienen nada que esconder, entonces dejen que nuestros inspectores entren ahora mismo sin ningún tipo de restricción y verifiquen. Pero no lo hicieron”, recordó Kerry.
La medida también permitiría al presidente extender las operaciones militares por 30 días más a la espera de una ratificación de parte del Congreso.