Líbano teme ser arrastrado por el caos de Siria

El secuestro de 12 libaneses en la provincia de Alepo y algunas muertes en regiones fronterizas, encendieron las alarmas.

Damasco afirma que el Líbano tiene sectores donde alberga a "terroristas" relacionados con Al Qaeda y a grupos islamistas que se someten a la oposición siria.
Tras los continuos ataques en regiones fronterizas entre Siria y el Líbano, Hassan Nasrallah, el líder de Hezbollah, hizo un llamado a la calma durante un discurso emitido por cadenas de televisión libanesas, después de que la gente bloqueó carreteras y quemó neumáticos en Beirut como protesta por el secuestro de 12 chiíes libaneses en Siria.

Los secuestros fueron perpetrados después de que una corte liberara bajo fianza este martes al musulmán suní Shadi Mawlawi, cuyo arresto a inicios de mayo generó disturbios en el norte del Líbano, región que apoya la revuelta contra Assad.

Según informó la agencia de noticias siria Saná, los libaneses salían de un peregrinaje religioso en Irán, cuando los rebeldes los capturaron en la provincia siria de Alepo.
"Trabajaremos día y noche hasta que esta gente amada esté con nosotros", dijo Nasrallah, quien ha manifestado su apoyo al presidente sirio Bashar Al Assad, para poner fin a la revuelta de 15 meses.

Libaneses opositores al régimen en Damasco, el pasado domingo lanzaron granadas a la capital donde murieron el jeque Ahmed Abdul-Wahid, un clérigo suní opuesto a Siria, y su guardaespaldas, hecho que desató combates entre los grupos suníes disidentes y a favor de Damasco.

Por su parte, Damasco afirma que el Líbano tiene sectores donde alberga a "terroristas" relacionados con Al Qaeda y a grupos islamistas que se someten a la oposición siria y además exige que Beirut impida el transporte de armas a lo largo de la frontera.

Los medios de comunicación internacionales, informaron que la explosión de una bomba mató a cinco personas en una población de Damasco que registraba continúas protestas contra Al Assad y enfrentamientos entre rebeldes y las fuerzas de seguridad.

Más tarde, de acuerdo a información proporcionada por la agencia Reuters, revolucionarios de la ciudad Deir al-Zor, al oriente de Siria, dijeron que la policía mató a dos personas cuando disparó contra una multitud que salió a recibir a observadores de Naciones Unidas.